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El hambre también ronda el Conurbano Bonaerense. El rastrillaje sanitario que empezó el gobierno provincial dos semanas atrás en los puntos del Gran Buenos Aires más comprometidos por la pobreza descubrió hasta el momento 15 chicos con grado dos de desnutrición. Según precisó a Página/12 el ministro de Salud, Ismael Passaglia, “8 de los menores requirieron hospitalización y los otros 7 no y a sus familias las estamos apoyando con alimentos”. Los pequeños subalimentados pertenecen a los partidos de Cañuelas, La Plata, Quilmes y Almirante Brown.
El relevamiento comenzó a partir de la trascendencia en los medios de las alarmantes cifras de desnutrición infantil en otras provincias. El operativo está a cargo de diez equipos del ministerio de Salud integrados por tres profesionales, que recorren los bolsones de pobreza bonaerense acompañados por personal sanitario de cada distrito. Los médicos caminan los barrios y villas con más carencias del primer cordón del conurbano y los propios vecinos orientan para detectar casos críticos. El control continuará en el segundo cordón. “Llevamos registrados 75.300 chicos de 0 a 6 años. De ese total, un 6,3 por ciento, es decir, alrededor de 4500, tienen desnutrición de grado uno, que es leve y significa poca pérdida de peso. Pero hay 15 con grados dos. En ningún caso, hay riesgo de muerte”, señaló Passaglia.
Todos los chicos con cuadros más graves, dijo el ministro, tienen alguna enfermedad asociada; la mayoría displasia pulmonar y parálisis cerebral. “Son chicos que hace tiempo que no iban a un hospital”, agregó. La mayor cantidad de pequeños con grado uno de desnutrición fueron detectados en los barrios de Villa Fiorito, de Lomas de Zamora; Triángulo de San José, en Florencio Varela; Altube, de José C. Paz; Pamperito, de Hurlingham; Puente de Fierro, de La Plata y La Matera, de Quilmes. “Cuando comenzamos con este operativo creíamos que nos íbamos a encontrar con cuadros peores”, admitió el funcionario y aclaró que, en realidad, el mayor problema en la provincia no es la desnutrición sino la anemia en niños y embarazadas por falta de hierro. En 30 días estará finalizado un relevamiento que actualizará los datos sobre chicos anémicos en el territorio bonaerense. Para paliar el déficit de hierro, el gobierno firmó un convenio con la municipalidad de Necochea para que fabrique sulfato ferroso para entregar a través de los planes materno infantiles. “Elaborándolo nosotros, el sulfato ferroso nos cuesta un 10 por ciento del precio que está en la farmacias”, destacó Passaglia.
Por otra parte, informó que durante este año se realizaron controles odontológicos a 20 mil chicos y se encontró que el 82 por ciento de ese universo tiene problemas bucodentales. Ese rastrillaje se hizo con hospitales odontológicos móviles.