SOCIEDAD
Parque Avellaneda, el modelo
Los vecinos de Parque Avellaneda inauguraron su experiencia en 1994 cuando, con el asesoramiento de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), conformaron el plan estratégico para la recuperación del parque. Dos años después, con el apoyo del flamante gobierno de la Ciudad Autónoma, conformaron la Mesa de Trabajo y Consenso. “Todo lo que se hizo en el parque de ahí en más se decidió en plenarios mensuales, pero no por votación sino por consenso”, explicó a Página/12 Daniel Conte, integrante de la Mesa. “Una vez decididas las obras, el gobierno las ejecuta con el presupuesto de cada área ya asignado para el parque”, agregó.
Mediante esa metodología, a lo largo de cinco años se logró recuperar un importante sector del parque que estaba alambrado y se restauró la vieja Casona de los Olivera, para convertirla en un centro de exposiciones.
En el 2000, el Ejecutivo porteño creó el Area Parque Avellaneda, un organismo que funcionaba dentro de la Secretaría de Medio Ambiente. Al año siguiente, en el marco de un recorte presupuestario, el jefe de gobierno, Aníbal Ibarra, eliminó esa área por decreto. Sin embargo, poco después la Legislatura legitimó, por ley, el funcionamiento de la Mesa de Consenso que, pese a la escasez de recursos, goza de buena salud.