SOCIEDAD › BARILOCHE, EL CALAFATE Y USHUAIA, A PLENO
En la Patagonia, todos festejan
Es tan blanca y radiante que despierta las fantasías de los turistas para hacer con ella lo que quieran. La nieve, protagonista central del invierno patagónico, atrae tras de sí a los esquiadores profesionales y también a los que sólo se contentan con armar muñecos. Esta temporada está siendo un éxito en destinos como El Calafate, Bariloche y Tierra del Fuego, que están repletos de turistas extranjeros y nacionales. En Bariloche, por ejemplo, la tercera semana de julio tuvo un aumento de 20 por ciento en su ocupación comparada con la misma semana de 2001. Y a Tierra del Fuego ingresó un 50 por ciento más de pasajeros durante este mes que en julio de 2001.
La provincia más austral de la Argentina es una de las elegidas. “Tierra del Fuego no tenía temporada alta de invierno –explica Guillermo Torre, secretario de Turismo provincial–. Pero a partir del año pasado cuando inauguramos el centro deportivo del Cerro Castor pudimos entrar a competir en el mercado nieve.” Y los resultados son visibles: al comparar julio de 2001 con el mes en curso se observa un incremento del 50 por ciento de pasajeros ingresados por vía aérea. Además, la provincia había hecho una fuerte campaña de difusión en Brasil que ya se está notando. “Hay un crecimiento de extranjeros respecto de 2001, aunque todavía no haya demasiadas cifras nos damos cuenta enseguida porque somos pocos”, bromea Torre. A partir del 15 de julio, la ocupación rondó entre un 80 a 90 por ciento y hay buenas expectativas para agosto.
Otros destinos como Villa La Angostura con una ocupación del 82 por ciento, Caviahue (conocido por su centro de esquí) con el 100 por ciento y Esquel –donde sólo quedan disponibles casas particulares para alojarse– confirman el éxito patagónico. Por su parte, en Bariloche se ven señales de una fuerte reactivación turística. Entre el 19 y 21 de julio llegaron 6.650 personas vía terrestre, lo que marca un aumento del cinco por ciento en relación con el 2001. Y durante lo que va de julio 23.170 personas llegaron en avión hasta la ciudad de los chocolates.
En la primera quincena de julio el 62 por ciento de las 17.500 plazas disponibles en Bariloche estuvo ocupada. Pero en el fin de semana del Día del Amigo el nivel trepó hasta un 82 por ciento. “Tenemos la combinación ideal porque hay turistas nacionales junto a chilenos, brasileños, uruguayos y algunos mexicanos y peruanos”, dice Hugo Cejas, secretario de Turismo local. La tercera semana de julio de 2001 hubo un 54 por ciento de ocupación y en la misma semana de este año llegó al 72 por ciento.
En la localidad de El Calafate tuvieron que suspender los avisos publicitarios que publicaban en medios porteños porque no hay lugar en los seis vuelos semanales –que comparten con Ushuauaia y Puerto Madryn– hasta mediados de agosto. “Este invierno tenemos toda la hotelería abierta y casi ocupada por completo, además de que hay muchísimas consultas por Internet y por teléfono, lo que es un gran avance teniendo en cuenta que la temporada anterior no hubo buenos resultados”, cuenta Alexis Simunovic, secretario de Turismo local. Y calcula en un 70 por ciento de nacionales y un 30 por ciento de extranjeros el origen de los turistas, fascinados por el esplendor del glaciar Perito Moreno.
Informe: Romina Rufato.