OPINION
Misión Imposible: IMF
LA POLITICA DE AJUSTE DEL FONDO MONETARIO
Por Carlos O. Pellegrini *
International Monetary Found o Impossible Mission Force. Viendo la comedia desarrollada para cerrar un acuerdo con el FMI parece oportuno precisar algunos aspectos. Desde que Argentina se incorporó a dicho organismo, de la mano de una dictadura militar, paulatinamente se fue transformando en un mendicante compulsivo, para beneficio exclusivo de los sectores dominantes donde cada acuerdo y/o negociación significó ingentes pérdidas de soberanía política e independencia económica.
En concreto, las exigencias planteadas en torno de los aumentos por decreto en las tarifas sin tener en cuenta las audiencias públicas, mantener las normas que regulan el funcionamiento de la ley de concursos y quiebras por pedido del FMI y clausurar los amparos judiciales de los ahorristas, lo que supone convalidar el saqueo de los bancos, conforman un plexo cuyo valor estratégico radica en la planificación de un brutal empobrecimiento de los actores afectados directa o indirectamente.
En el mismo sentido, las modificaciones a la Carta Orgánica del BCRA impulsadas por el FMI y tomadas como propias por la mayoría automática del Central, vinculada al CEMA y a la banca extranjera, suponen convertir al Banco Central en un Ente supranacional. Más aún, las medidas dirigidas a otorgar inmunidad al Directorio, la autarquía financiera y la independencia del BCRA, lo convertirían en un nuevo poder no previsto en la Constitución e inclusive fuera del alcance del Poder Judicial.
Así las cosas, no cabe otra alternativa que posponer cualquier negociación hasta la asunción de un nuevo gobierno. En tanto, se deberían tomar las siguientes medidas:
1. Publicación de los nombres de los tenedores de títulos de deuda externa para que el pueblo sepa a quiénes les debemos.
2. Revelar si existen condicionamientos de carácter reservado, tal como ha ocurrido en todas las negociaciones anteriores.
3. Remoción del Directorio del Banco Central.
4. Informar si existe la documentación original desde 1976 a la fecha que respalde la pretensión de los acreedores internacionales, contrario sensu denunciar penalmente a los funcionarios públicos responsables de la salvaguarda de dichos títulos, en razón de la sospecha dolosa que la instrumentación de la deuda conlleva.
5. Denunciar en los Foros Internacionales que correspondan la ilegitimidad de buena parte de la deuda y la injerencia por parte del FMI.
Por último es dable señalar que no se puede honrar aquellos que con deshonor nos impusieron por defección y/o traición de la dirigencia política-sindical-empresaria. Volver a insertar nuestro país en el concierto de naciones soberanas sin producir cambios de fondo será entonces una misión imposible.
* Secretario general, comisión gremial interna, Banco Central