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Por Ana Lía Milanesio

Los pequeños y medianos empresarios de la región centro que sobrevivieron al modelo neoliberal se organizaron para impulsar el compre nacional, además de alentar acciones tendientes a fortalecer el mercado interno. A través de un programa que tuvo origen en la ciudad cordobesa de Villa María –coordinado por la Asociación de Empresarios de la Región Centro de Argentina, que agrupa a los micro, pequeñas y medianas empresas– se delinearon actividades para concientizar a los consumidores sobre la importancia de comprar productos de origen nacional. Esa experiencia puso énfasis en dos pilares: el industrial y el educativo.
En el plano industrial el proyecto exhortó a los fabricantes a identificar sus productos con un logotipo homologado bajo la denominación “Hecho en Argentina... Bien Hecho” flanqueado con la bandera nacional.
En la faz cultural las acciones alcanzan a los ámbitos escolares, bibliotecas, organizaciones sociales, para estimular a los alumnos y socios a resignificar la identidad nacional mediante actos, concursos y campañas.
En sintonía con su tesis “vivir con lo nuestro”, el economista Aldo Ferrer explicó a Cash que “esta experiencia es una iniciativa excelente; es un síntoma más de la recuperación del sentido de pertenencia nacional, lo que permitirá generar un espacio de proyección para insertarse en el mundo. Para tener éxito en la globalización primero hay que afirmar la identidad nacional, o sea, vivir con lo nuestro”. “Lo más significativo –agregó Ferrer– es que esta iniciativa va más allá del efecto que pueda tener sobre la demanda de mercancías nacionales razonablemente competitivas.” Y concluyó con que “es un aporte a la actitud filosófica de vida, mirar dentro del propio espacio, en la cultura, en lo político, en lo económico para afirmar la identidad”.
En esta primera etapa del programa se suscribieron casi 200 empresas y fábricas de la región centro; cerealeras, de maquinarias agrícolas, de indumentaria y textiles. Según Jorge Daher, presidente de la Asociación, la idea es trasladar la inquietud a nivel nacional, “por eso estamos analizando el programa con la Unión Industrial de Córdoba y de Mendoza, al tiempo que proyectamos extenderlo hacia Buenos Aires a través de la Confederación Argentina Mediana Empresa”. Esta propuesta del sector privado está abierta a todas las empresas o industrias nacionales que ostenten el 51 por ciento o más de composición societaria de origen argentino y a los productos con el 51 por ciento o más de sus componentes manufacturados en el país.