INTERNACIONALES › QUIENES FUERON LOS POLITICOS RECIENTES MAS CORRUPTOS
Los peores de todos
El descubrimiento de cuentas secretas y millonarias de Pinochet es sólo un emergente más de la relación dictadura-corrupción.
Por Guillermo Altares *
En Haití, el país más pobre del hemisferio occidental, el ex presidente Jean-Claude Duvalier se las arregló para amasar una fortuna de entre 300 y 800 millones de dólares entre 1971 y 1986. Y Baby Doc ni siquiera encabeza la lista de los diez gobernantes más corruptos de los últimos años, que publicó recientemente la ONG Transparencia Internacional (TI). En cabeza está el dictador indonesio Mohamed Suharto (1967-1998), que desfalcó entre 15.000 y 35.000 millones de dólares. Ferdinand Marcos (1972-1986) robó a los filipinos entre 5.000 y 10.000 millones de dólares, mientras que el sátrapa zaireño Mobutu Sese Seko (1965-1997) se llevó unos 5.000 millones, la misma cantidad que el nigeriano Sani Abacha amasó entre 1993 y 1998, una cifra que representa el 10% de los ingresos petrolíferos de este país en cinco años.
“Con esta lista hemos querido ilustrar la magnitud del problema de la corrupción política”, según Toby Wolfe, uno de los responsables del informe en el que, cada año, TI evalúa el estado de la corrupción en el mundo. Wolfe aclara que las cifras son aproximadas. “En materia de corrupción, es casi siempre imposible conseguir cifras precisas”, un dato sobre el que también insiste el propio informe: “En general, se sabe muy poco sobre las cantidades que han desfalcado muchos líderes”. Además de los citados, la funesta lista se completa con el dictador serbio Slobodan Milosevic (1989-1990), con 1.000 millones de dólares; el peruano Alberto Fujimori (1990-2000), con 600; el ex primer ministro ucranio Pavlo Lazarenko (1996-1997), con entre 114 y 200 millones; el ex presidente nicaragüense Arnoldo Alemán (1997-2002), con 100 millones; y el ex presidente filipino Joseph Estrada, con entre 78 y 80 millones.
La lista se completa con el Producto Bruto Interno (PBI) per cápita en cada uno de los países arrasados por la corrupción gobernante: los 99 dólares de Zaire (hoy República Democrática del Congo) contrastan con los 12.000 millones de dólares que este país recibió en ayudas del Banco Mundial durante los 32 años de gobierno cleptocrático de Mobutu y que, según TI, “desaparecieron”.
En Nicaragua, uno de los países más pobres de América latina, donde muchos ciudadanos sobreviven con menos de un dólar al día y que destina casi un cuarto de su presupuesto a pagar la deuda externa, Alemán puso en marcha un sistema de gobierno que le permitió explotar todas las formas posibles de enriquecimiento ilícito. “La peligrosa combinación de inmunidad ante la justicia y poder personal ilimitado permite a los líderes corruptos devastar sus países con el robo sistemático de sus riquezas”, escribe Tim Daniel, que investigó para TI.
Wolfe asegura que casos como el de Alemán, condenado a 20 años de prisión, o del ucranio Lazarenko, a punto de ser juzgado en EE.UU. por el lavado de 114 millones de dólares, demuestran “que se han producido avances frente a la impunidad”. El informe, sin embargo, recuerda que tras una investigación en 406 bancos suizos, que comenzó el día anterior a su destitución, en mayo de 1997, sólo se encontraron 4 de los miles de millones robados por Mobutu.
* De El País de Madrid, especial para Página/12.