Sábado, 6 de octubre de 2007 | Hoy
“CHE GUEVARA, DONDE NUNCA JAMAS SE LO IMAGINAN”, MAÑANA CON PAGINA/12
El cuarto DVD de la serie “Cuba: caminos de la revolución” incluye imágenes y testimonios inéditos sobre el revolucionario, a quien sigue a través de su riquísima historia militante.
Por Emanuel Respighi
Infinidad de líneas se han escrito sobre la vida del Che Guevara y muchas más horas se han ocupado en los medios de comunicación para contar, analizar y explicar la trayectoria y el legado que el revolucionario argentino dejó a lo largo del mundo entero. Símbolo de la lucha de los pueblos, sin distinción de fronteras geográficas, culturales o idiomáticas, Ernesto Guevara es, fue y será tema de estudio. Sin embargo, pocas veces ese monstruoso acopio de información sobre la vida y obra del Che fue acompañado por material audiovisual que diera cuenta de aquellos años en los que otro mundo era posible para el rosarino y para miles de personas. Pero esa situación llegará mañana a su fin, gracias a Che Guevara, donde nunca jamás se lo imaginan, el cuarto DVD de la serie “Cuba: caminos de la revolución”, que mañana acompañará la edición de Página/12. Un documento histórico que sigue detalladamente a la figura del Che desde su nacimiento hasta su muerte y que por primera vez se edita en Argentina.
Producido por el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica (Icaic), el DVD de más dos horas y media es sin duda el material audiovisual más completo que jamás se haya hecho sobre una de las personalidades latinoamericanas más importantes del siglo XX. Cuenta con imágenes inéditas que sorprenden no sólo por su conservación, sino fundamentalmente por el tiempo que estuvieron archivadas bajo candado en la isla, más específicamente en la radio y televisión cubanas y en el Instituto Cubano de Cine. Un contenido visual sumamente valioso para, además de escuchar cómo era el Che de boca de quienes lo conocieron y lucharon con él, poder ver con propios ojos su desempeño en las filas revolucionarias y la relación que mantenía con sus compañeros de lucha en plena actividad guerrillera.
Con la fuerza de esas imágenes, más el poder intrínseco de la palabra y el accionar de Guevara, el documental presenta como nunca antes las diversas facetas que convirtieron a “el argentino”, “Ernesto”, “el médico”, “Guevara”, tal como lo conocieron inicialmente sus camaradas, en simplemente el “Che”. Bajo la dirección de Manuel Pérez Paredes, Che Guevara... se inicia en mayo de 1968 con la noticia de la publicación del diario de campaña de Guevara en Bolivia, para luego asistir a los pormenores del último combate que libró en la Quebrada del Churo, el 8 de octubre de 1967. Tras ese preámbulo, el documental avanza recorriendo los momentos más importantes de una vida signada desde su mismo nacimiento por la lucha. “A los 15 días de haber nacido –cuenta Ernesto Guevara Lynch padre– tuvo una pulmonía muy seria, que quizás ésa es la verdadera causa de su asma. No comía, no tomaba leche... Hasta que de pronto se prendió a la teta de la madre y puso cara de alegría. Ahí le dije a Celia: ‘El niño va a estar bien, es fuerte’.”
Haciendo más hincapié en el nacimiento de sus ideas políticas que en sus años en Argentina, Che Guevara... muestra el compromiso que Guevara va teniendo con los sectores más oprimidos de los pueblos y cómo el hombre de pensamiento le va haciendo lugar al hombre de acción desde aquel iniciático viaje por América latina junto a su amigo Alberto Granado y su posterior viaje a Guatemala, donde toma la decisión definitiva de entregarse de lleno a sus ideales antiimperialistas. “En Guatemala –le explica el Che a su madre en una de las cartas que le envió explicándole los fundamentos de su determinación– podría hacerme muy rico, pero con el rastrero procedimiento de revalidar el título de médico, poner una clínica y dedicarme a la alergia. Acá está lleno de colegas del fueye... Hacer eso sería la más horrible traición a los dos yo que se me pelean dentro: el socialudo y el viajero.”
Che Guevara, donde nunca jamás se lo imaginan cuenta, además, con cuatro documentales extras que completan la vida del Che desde otros aspectos. El primero de ellos, “Hasta la victoria, siempre” (dirigido por Santiago Alvarez), repasa las ideas sociales y políticas más representativas del argentino a través de diferentes discursos, con una joya: el primer mensaje al pueblo cubano que dio Guevara por medio de la radio clandestina Rebelde desde Sierra Maestra. “Durante los 16 meses que hemos estado en Sierra Maestra –dijo en aquella transmisión– han venido periodistas de muchas partes del mundo y se han preocupado de la parte anecdótica de esta guerra de guerrillas... Hoy aprovecho para dar el primer saludo al pueblo cubano, un pueblo que he querido defender conociendo solamente la acción y el pensamiento de nuestro jefe Fidel Castro.”
El segundo extra se titula “Entre leyendas”, un trabajo realizado por Rebeca Chávez en el que se cuenta la vida íntima del Che como jefe revolucionario. A través de los testimonios de Pombo (Harry Villegas), Urbano (Leonardo Tamayo) y Benigno (Dariel Alarcón), los únicos sobrevivientes de la campaña revolucionaria en Bolivia, el especial se detiene en el aspecto espiritual y humano del Che, así como también en su capacidad de liderazgo en pleno combate. “A la gente, cuanto más la quería, más le exigía”, lo describe Pombo.
También bajo la dirección de Chávez, “Octubre del 67” recrea los últimos días del Che en el monte boliviano, a partir de testimonios de compañeros y campesinos, expedientes, diarios e informes de la policía y el ejército boliviano. “No lo podíamos atrapar porque el Che estaba siempre adelante”, confiesa el comandante de los Segundos Rangers, las tropas bolivianas entrenadas por militares estadounidenses.
Por último, “Una foto recorre el mundo”, de Pedro Chaskel, analiza el alcance mundial que tuvo la famosa foto que tomara Alberto Korda como símbolo de la lucha de los pueblos. “Voy paneando mi cámara lentamente y en ese momento aparece la cara del Che en un segundo plano”, relata quien inmortalizó al Che con esa imagen tomada el 5 de marzo de 1960, durante un acto en el que se recordaba a las víctimas del sabotaje perpetrado por la CIA al barco francés La coubre. “Su cara me impresionó tanto –confiesa el fotógrafo– que cuando la vi con el visor nunca se me olvida que instintivamente me tira hacia atrás. Me asustó un poco y, al mismo tiempo de asustarme, apreté el obturador.” Imágenes, relatos y recuerdos de un DVD tan atrapante como la misma vida y obra del Che.
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