8-Oracular Spectacular

MGMT. Sony/BMG

Tal vez por la presencia de Dave Fridmann tras la consola, la primera impresión que entrega el dúo neoyorquino es que suena tan bombástico como los últimos Flaming Lips. Enseguida aparecen referencias cruzadas, desde la locura de Ween hasta la solemnidad de Mercury Rev, con algo del Bowie de los ’70 y el space rock de Air en el medio. Por fortuna, a MGMT el retrofuturismo setentoso se le confunde con las ganas de bailar como sus colegas new ravers, de ahí que hayan pergeñado un single irresistible como “Kids”. R. C.

10-Schubert. Mozart

Zukerman, Bronfman, etc. RCA, 2008

El Cuarteto para piano y cuerdas en Mi Bemol Mayor, de Wolfgang Amadeus Mozart, es una de sus obras más intensas. El Quinteto para piano y cuerdas “La trucha”, con su aparente liviandad, se instala en un paisaje indudablemente melancólico. Mozart agrega una viola para oscurecer al trío habitual y Franz Schubert añade además un contrabajo. El pianista Yefin Bronsman, el violinista Pinchas Zukerman, Jethro Marks en viola, Amanda Forsyth en cello y Joel Quarrington en contrabajo construyen versiones magistrales. D. F.

8-Viajante

Tremor. Los Años Luz

Basta ver los instrumentos participantes para advertir por dónde puede ir el asunto: charango, ronroco, bombo legüero... y samples, sintetizadores, gaita búlgara, vocoder, “objetos cotidianos”. ¿Engendro tecnofolklórico? Nada de eso: en diez canciones hipnóticas y encantadoras, Leonardo Martinelli, Camilo Carabajal y Gerardo Ferez construyen un disco sorprendente y adictivo, un malambo electrónico que elude todo lugar común sobre lo telúrico asociado a los bits. E. F.

7-Sombra de ombú

Belén Ilé. Unión de Músicos Indep.

La cantante y compositora Ilé es porteña, pero parece uruguaya, reconoce influencias brasileñas y se le nota que vive en Barcelona. Su disco es un resultado posible de esa mixtura genético-ambiental. Un enfoque naturalista y un espíritu bucólico, pero no naïf, atraviesan las canciones de Sombra de ombú, donde combina búsquedas personales (“Luna costera”, “Márgenes”, entre otras) con respetuosas versiones de Mateo, Fandermole, Juan Falú y Carlos Aguirre, por citar algunos. Sin arriesgar mucho, ofrece sensibilidad y buen gusto. F. D.