Tal vez sea porque –de alguna manera– notó que había cierta identificación entre el trabajo de los fiscales y el suyo, ya no en su faceta de conductora televisiva, sino en su tarea como periodista de investigación, explorada en Telenoche investiga y No matarás. O puede que regresar a la conducción de un ciclo alejado de la coyuntura diaria de Telenoche haya sido una tentación muy alta para saciar a la periodista que conserva en su interior. Seal cual fuere el motivo real, lo cierto es que María Laura Santillán aceptó sin dudarlo conducir Fiscales, el ojo de la ley, el ciclo periodístico que esta noche (al término de ShowMatch) estrena Canal 13. Producido por Ideas del Sur, el programa posará su lente en el trabajo de los fiscales, mostrando los procesos judiciales por dentro.

Aunque la atención de la gente siempre se detiene en los juicios, las detenciones o el dictamen final de un caso, lo cierto es que detrás de cada una de estas instancias se encuentra el silencioso pero arduo trabajo de los fiscales, aquellos servidores públicos que deben pedir y analizar pericias, detenciones y declaraciones. Todos pasos imprescindibles para recabar pruebas y llevar un caso a juicio y desentrañar la verdad. De alguna manera, aunque en todo caso hay jueces, policías y abogados, son los fiscales los investigadores de la Justicia. Valiéndose de imágenes de archivo, testimonios y alguna dramatización, Fiscales... no hace otra cosa que acercar al público masivo a la parte menos conocida y más interesante del mundo de la Justicia.

“Mostrar la tarea de los fiscales, la Justicia por dentro y cómo se lleva adelante una investigación son todas cuestiones demasiado interesantes y no me pude resistir”, explica en la entrevista con Página/12 Santillán, que vuelve a la conducción de un ciclo de investigación periodística después de ¿A quién le importa la educación? y los dos especiales de Una larga noche para el 13. De hecho, la tentación –confiesa– fue tan grande que pese a estar sumamente ocupada con la conducción de Telenoche y la ahora sección Telenoche investiga, Santillán decidió embarcarse de lleno al frente del programa producido por el mismo equipo de producción de Forenses, cuerpos que hablan. “Este año no tenía ningún proyecto mío para hacer por fuera de Telenoche. Me entusiasmó mucho la idea de Fiscales... porque nunca se había mostrado la tarea cotidiana de los fiscales. Doce años atrás habíamos mostrado en Justicia para todos los juicios orales y públicos, a partir de la decisión implementada en su momento por León Arslanian. Pero fue una experiencia muy prematura en comparación con Fiscales..., que apunta más a hacer público la investigación judicial. Es un programa ideal para mí”, dispara, con un entusiasmo que contrasta con la imperturbable imagen de Santo Biasatti, su coequiper en el noticiero del 13.

Desarticulando cualquier tipo de estructura a la que atarse, Fiscales... mostrará el trabajo de los fiscales en sus distintas etapas: desde su tarea en la escena en la que se producen los hechos (toma de rehenes, robos, accidentes, secuestros, homicidios) hasta su trabajo en el juicio, pasando por su cercana relación con los familiares de las víctimas. Utilizando diversos esquemas narrativos según los casos, el programa avanza a través de tres tipos de relatos bien diferenciados. A partir del juicio grabado, mediante el cual se reconstruye el hecho y cada uno de los pasos dados en la investigación hasta llegar al resultado final; a partir del delito (siempre casos cerrados), donde se muestra el trabajo del fiscal y su relación con la familia; o el relato transcurre mostrando la acción de los fiscales en tiempo real, desde que son requeridos y se presentan en el lugar del hecho hasta su trabajo en la UFI correspondiente a su jurisdicción.

–En este tiempo de trabajo a la par de los fiscales, ¿se sintió identificada con la labor de los fiscales en su tarea como periodista de investigación?

–Yo prefiero siempre marcar las diferencias. Los periodistas no somos fiscales. A mí me encanta hacer periodismo. Es lo que hago y no tengo otra pretensión más que ésa. La investigación judicial es de una instancia superior. La periodística es una investigación valiosa y que tiene su correlato en la Justicia, pero es incomparable con la judicial, que es imprescindible para cualquier sociedad. Los fiscales son los defensores de todos y cada uno de nosotros. Y se trata de una tarea muy compleja: tienen sobre sus espaldas la responsabilidad de encontrar a los culpables. Los periodistas y los fiscales nos emparentamos en que se trata de dos tareas fundamentalmente vocacionales.

–Por lo general, la tarea del fiscal no tiene el reconocimiento que poseen otras instancias de servicio público, como los bomberos, por ejemplo.

–Es que la sociedad no conoce el trabajo del fiscal, que se relaciona con el de los médicos o los docentes. Hay muchos fiscales de mucha trayectoria y gran integridad que no desean seguir escalando en la carrera judicial, como Pablo Lanusse o Jorge Strassera: por más pergaminos que tengan, ellos quieren morir siendo fiscales. Es interesante que la gente conozca este aspecto de la Justicia más allá de lo que pueden ver en una serie de ficción sobre fiscales.