7-DERECHO DE FAMILIA,

de Daniel Burman. Con Daniel Hendler, Julieta Díaz y Enrique Goetz.

2006, 102 min. AVH.

Cierre de una trilogía virtual inaugurada con Esperando al mesías (2000) y continuada con El abrazo partido (2003), Derecho de familia confirma la consolidación de temas y estilo desarrollada por su director, Daniel Burman. Una vez más Daniel Hen-dler funciona como alter ego, en crisis aquí por esa típica encerrona de la madurez que es la de aprender a ser a un tiempo hijo y padre. Entre ambas puntas, Ariel duda, se queja, cavila, boludea, tira la pelota al costado, hasta que no le queda más remedio que aceptar(se). Con gran velocidad, muy buen timing de comedia y enorme cantidad de chistes, comentarios y ocurrencias, Burman se confirma como una suerte de Houdini cinematográfico: un maestro de la evasión.

7-CAUTIVA,

de Daniel Biraben. Con Bárbara Lombardo, Susana Campos y Hugo Arana.

2003, 115 min. SBP.

Con bastante atraso se estrenó esta buena película sobre el tema de la apropiación de niños, filmada por el argentino (radicado en Estados Unidos) Gastón Biraben. Bárbara Lombardo (a quien el típico gesto de nena enfurruñada sienta a la perfección en este caso) es la chica de colegio religioso, que recibe un día la visita de una señora (Susana Campos, soberbia) que dice ser su abuela. De ahí en más, bronca, rebelión, alianza con los padres apropiadores (magníficos Osvaldo Santoro y Silvia Baylé) y no pocas dosis de macarthismo espontáneo. Hasta que la intervención de un juez (sorprendente Hugo Arana) comienza a encarrilar las cosas. No sorprende, pero está contada de modo cristalino, sin tropiezos.

7-LA HISTORIA DEL CAMELLO QUE LLORA,

de B. Davaa y L. Falorni. Con J. Ayurzana, Ch. Ohin y A. Gonson.

2003, 85 min. Transeuropa.

Cómo generar empatía con una camella y su cría, a partir de una situación que no puede dejar indiferente a nadie, pacientemente observada y registrada. Una camella, propiedad de una familia nómada de Mongolia, da a luz a su cría con un esfuerzo enorme, debido al inusual tamaño de aquélla. Su reacción de allí en más es rechazarlo, negándole alimento y poniéndolo al borde de la depresión y la muerte por inanición. La familia acude entonces a un antiguo ritual, entre folklórico y mágico, consistente en la sensibilización de la camella a cargo de un músico, venido especialmente para ello. Cine antropológico que comunica cuestiones universales, La historia del camello... demuestra que se puede ser simple sin ser simplote.

5-EROS,

de M. Antonioni, S. Soderbergh y Wong Kar-wai. Con . Downey Jr., Alan Arkin y Gong Li.

2004, 108 min. Transeuropa.

El puntaje asignado es en esta ocasión más impreciso que nunca, ya que se trata de un simple promedio: un 1 para el de Antonioni, un 5 para el de Steven Soderbergh y un 8 para el de Wong Kar-wai. Pensada como homenaje a Michelangelo Antonioni, que a los ochenta y pico se moviliza en silla de ruedas y está afásico, ese tiro salió por la culata, ya que el episodio Antonioni (dirigido por él o quien haya sido) es algo así como una versión soft-porno y de mesa ratona de sus peores clichés de abulia burguesa. El episodio Soderbergh importa poco y nada, mientras que con el suyo Wong Kar-wai salva los papeles, con un minimelodrama exquisito y conmovedor en el que les canta una vez más a los amores (y tiempos) perdidos.