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“Lo que me interesa comunicar en la muestra Relatos es qué significa convivir con la ficcionalidad desde un lugar verdadero, verdadero por la historia de nuestras vidas, por la lucha de nuestros familiares y compañeros de camino. Es por esto que su armado lo pensé desde el lugar de la subjetividad”, señala su curadora, la artista Soledad Sánchez Goldar, que a partir de la invitación de Agustín di Toffino, secretario ejecutivo de la Secretaría de Derechos Humanos, convocó a Lucas di Pascuale, Aníbal Buede, Gabriela Halac, Natalia Colón y Tomás Alzogaray, artistas cordobeses que desde el inicio de sus carreras investigan y trabajan en diferentes espacios para la memoria de su ciudad natal.

Relatos reúne cinco puestas diferentes, que logran convivir una con otra, en donde cada artista revisa momentos de militancia, ex sitios clandestinos cordobeses e historias personales de la última dictadura cívico militar.

Es con esta impronta que Visitas a la Perla, de Gabriela Halac, surge luego de una visita guiada y que después invita a diez personas que no son ni familiares, ni víctimas a recorrer su propio camino, lejos de una guía indicada. A partir de este recorrido, la artista realiza un video con una toma fija de “la cuadra”, espacio donde lxs detenidxs desaparecidxs pasaron sus días de confinamiento, también toma testimonios a las diez personas elegidas que recorren el espacio para luego volcar, editar sus palabras y así montar una videoinstalación. “Estas visitas plantean un punto crítico sobre lo que significa tener o no una voz autorizada sobre la represión, dar espacio o no para la aparición de otras historias y pensamientos menos visibles pero igualmente elaborados y presentes”, dice Halac.

La puesta RED de Aníbal Buede sucede a partir de la elección de tres militantes: Rodolfo Walsh, Envar El Kadri y Diana Trai, y de material que recopiló sobre la historia de sus vidas, como por ejemplo una carta de Diana que encontró el Equipo de Antropología Forense. Es con esta impronta que invita a tres personas de la cultura de Buenos Aires (Juan Terranova, Pío Longo y Virginia Buitrón) para que lleven a cabo durante un día tres performances tomando el lugar de cada uno de estos tres militantes. Lo que se ve en la puesta final son textos que arman un mapeo de registros sobre dicha performance junto a fotografías del pasado y presente. “Estos son proyectos que ponen en tensión ciertas construcciones de la memoria”, señala su curadora.

Al finalizar, en la Sala tres, se encuentra la obra de Natalia Colón llamada ¿Se sabe algo? Objetos encontrados como joyas, cartas, esculturas de alpaca rotos por la explosión sufrida en el momento de desaparición forzada que sirvieron para reconstruir la identidad de sus padres en el momento de su juicio. Así como Colón guarda lo único que tiene de sus padres, Cuadernos de exilio, de Tomás Alzogaray, examina lo que fue su partida a México en su niñez con una puesta de cuadernos de ediciones típicas de los años ‘80 de México y Argentina. También se suma a la puesta la partida de nacimiento de su hermana y dibujos en pizarrones, porque lo que le interesa es volcar la exploración que hace de su niñez en época de exilio.

Por último, Botín, de Lucas di Pascuale, es una recopilación de proyectos que viene trabajando en diferentes espacios tanto en la provincia de Córdoba, como en Buenos Aires. Aquí recoge trabajos tales como Hola, tengo miedo, fanzines con dibujos generados a partir de su residencia en el Espacio de la Memoria La Perla, Apunte Daleo, transcripción del testimonio de Graciela Daleo en el juicio a las juntas militares argentinas de 1985, todos sobre la bandera del Partido Transportista de Votantes (PTV). Un puñado de artistas cordobeses que reflejan el pasado y el presente con su lenguaje propio, el que encontraron para sanar sus heridas.

Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti. Avenida del Libertador 8151. Martes a viernes 12 a 21 hs. Sábados, domingos y feriados, de 11 a 21 hs. Entrada gratuita.