Mientras tanto, mientras tanto, mientras haya tanto no hay problema por lo que una/o/e deba hacer o pensar en el medio. ¿En medio de qué? ¿Entra el primero y el segundo? Perdón, quise decir entre, entre no más mi querid/a/o/x que hay lugar para todis y tedis, y sí, también para los ositas y las ostritas y el vergel animado en que nadamos a diario y si no nadamos nos hamacamos y si nos hamacamos la vida es más feliz, más amable, más cálida y por qué no más mojada. Pero no todo es acción, también hay momentos de relajo, de blando sopor en los que uno/a/e/x aprovecha para hacer cosillas que no siempre están recomendadas como bien se puede apreciar en estos consejillos.

Clásico: Fumar sí, pero ojo con la brasa. Actividad primaria, tan primaria que es imposible recordar quién dijo aquello de que un whisky antes y un cigarro después eran el colmo de la algarabía. Aunque podemos suponer que fue un chongo porque si es por nos la alegría la encontramos (o no) en el medio. Hay quienes fuman sustancias volátiles que dejan caer pequeñas brasas, ¡cuidado!, no está bien pasar del intermezzo al SAME.

Gourmet: Adelante con la comida, pero ojito, un poco de sal está bien, más no todo el salero. Y mucho menos el pimentero, la tabasco, los porotos pallares o el guiso de lentejas que quedó del mediodía. Que se le abra el apetito no debe hacerle olvidar que todo lo que entra sale y lo que se acumula explota. Y no siempre en el mejor momento. Sea prudente disfrute de los cantos pero no de esos que emiten los ídem.

Hi tech: El celular no, no, no. ¿Sus amigas la presionan para que dé detalles?, ¿los compañeros de oficina buscan puntaje para su/la de la/el otra/tro performance? ¿Para qué está Ud. ahí? ¿Para competir con los/las/les suyos/as? ¿Tiene algo que demostrar? ¡Entonces deje ya mismo los mensajes de texto! ¡Abandone los comentarios en clave durante ese llamado falsamente inesperado! Y sobre todo ¡no evalúe antes de tiempo que lo que hoy es diez mañana es seis!, o viceversa.

Push & Pus:Actividad exquisita aunque un poco chancha, sólo recomendable para amantes experimentados, flojos/as de prejuicios, poco impresionables y con alguna/mucha confianza. Consiste en la inspección detallada de la superficie corporal del/la otra/o en busca de impurezas que quitar, protuberancias que apretar, cicatrices sobre las que hablar, en fin, todo un mundo por descubrir. Alerta: No se asegura que después de esta actividad haya algo por remontar o deseos de hacerlo. Corre por su cuenta.