Si usted creía que con evitar los siete pecados capitales ya estaba, vaya preparando el anotador, porque se han agregado los “pecados sociales”. Entre éstos, el chat es el favorito para los religiosos que ven en Internet una amenaza para la reflexión pascual. Le siguen el e-mail y los mensajes de texto. Según manifestaron hace pocos días los párrocos de Virasoro y de Fátima de Corrientes, la “cultura de la imagen, basada en el egoísmo, la vanidad y la soberbia” atentarían contra el comportamiento libre de pecados.

Pero no es la primera vez que la Iglesia se refiere a los tecnopecados. Ya en el año 2004, el segundo en orden de importancia en el Vaticano, Gianfranco Girotti, reunido junto con 40 teólogos en la Conferencia Episcopal Italiana, incluyó en la lista pecaminosa al uso indebido de la PC —incluidos los programas que no tengan su correspondiente licencia— bajar música o películas ilegalmente, enviar spam, la creación y uso de sitios pornográficos, el chat —específicamente cuando se suministra información falsa acerca de la propia persona— y toda acción de hackear un programa.

Si uno debe admitir que se condene “establecer una forma de relación amorosa” vía chat, deberá preguntarse entonces qué hubiera sido del amor entre el conquistador Napoleón Bonaparte y Josefina si no hubiesen podido comunicarse por carta (que era la forma con que se conocía la virtualidad, antes de Internet).

Pero como muchas veces, hay una de cal y una de arena. La Iglesia, que ha permitido a sus fieles comer carne durante la Cuaresma (siempre que se abstengan de ello durante el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo) porque “la abstinencia puede pasar por el corazón y no por el estómago. Si usted hará a un lado las recomendaciones religiosas y se dedicará a chatear (verbo que fue incorporado en su acepción informática en el pasado 2007 por la Real Academia Española) sin temor de ir al infierno, debe saber que los protocolos de chat más conocidos son los de MSN Messenger (http://webmessenger.msn.com), Yahoo! Messenger (http://es.messenger.yahoo.com), GTalk —el chat de Google— (http://google.com/talk) y Jabber (http://jabberes.org). Y que si no cuenta aún con sus propios contactos de chat, puede iniciarse probando alguna de las salas que están habilitadas en los portales de Internet más visitados.