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Vélez se rehabilitó ante sus hinchas después de la catastrófica goleada que sufrió el miércoles pasado ante Boca y le ganó, aunque con sobresaltos pese a disponer de las mejores situaciones, a Gimnasia, ubicándose a dos puntos de River.
El gol de la victoria llegó a 20 minutos del final del partido cuando el mejor jugador de la cancha, Lucas Castromán, eludió a Goux entrando por derecha, remató y el balón entró por el medio del arco sin que Noce nada pudiera hacer para impedirlo. El arquero visitante le había atajado un penal a Zárate en el final del primer tiempo.
“Jugamos bastante bien –opinó el delantero Lucas Valdemarín–. Fue duro y la victoria creo que fue justa. En este encuentro dejamos en claro que el plantel estuvo y está unido para remontar la goleada en contra con Boca. Estamos otra vez de pie.”
Gimnasia quiso ir por el empate pero, ausente Enría, desnudó sus limitaciones en la definición ante un equipo que, como Vélez, entonado por la diferencia, habría podido aumentar la ventaja de contragolpe, con Gracián, Valdemarín y, sobre el epílogo, con Jonás Gutiérrez.
“La bronca de haber errado el penal se me fue con la victoria y el cariño de la gente, que me aplaudió cuando fui reemplazado –señaló el goleador de Vélez, Rolando Zárate–. No estoy diez puntos ni física, ni futbolísticamente hablando, pero eso no tiene nada que ver con el penal que erré.”
Según Leandro Somoza, “Gimnasia fue un rival muy duro, que metió mucha presión en el medio. Con esta victoria de hoy, tras la derrota con Boca, el equipo volvió a levantarse, demostrando que está en carrera”.
“En el primer tiempo fuimos un equipo, creo que estuvimos indecisos. En el segundo, mejoramos bastante. Nos mostramos firmes, seguros de lo que queríamos”, dijo el volante Pablo Batalla.