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Las Leonas recibieron un cachetazo. En un partido en el que estaba en juego el primer lugar de la zona, las chicas argentinas cayeron 3-2 ante China y se tuvieron que conformar con la segunda posición, lo que determinó que en las semifinales de mañana se tengan que cruzar con Holanda, ganador del otro grupo y el principal candidato a quedarse con la medalla dorada. Argentina caía 2-0 en el arranque del partido, luego llegó a la igualdad gracias a dos tantos de Luciana Aymar, pero en la segunda parte las chinas anotaron el tercer y decisivo gol. La otra semifinal la protagonizarán China y Alemania, que ayer derrotó 2-0 a Corea del Sur.
Más allá de la caída, Las Leonas dejaron en claro que su nivel es óptimo, ya que merecieron al menos el empate. Sin embargo, la falta de puntería frente al arco rival impidió lograr un resultado más acorde con las acciones de juego. Para colmo, el conjunto de Sergio Vigil se encontró muy rápido en desventaja por un gol de Ma Yibo luego de un corner corto. Cuando las argentinas buscaban el empate con ansiedad, las asiáticas aumentaron la diferencia gracias a otro corto, que esta vez convirtió Fu Baogong, tras un rebote en la arquera argentina Mariela Antoniska.
Con dos goles abajo, las argentinas mostraron su mejor imagen y dominaron el desarrollo por el buen traslado de sus volantes. En ese pasaje apareció, además, el talento de Aymar, para convertir dos goles y poner el justo empate al final de la primera etapa. Cuando parecía que Las Leonas llevaban la iniciativa y se quedarían con la victoria, otro corner corto de las chinas terminó con el tercer tanto, esta vez a cargo de Chunling Tan. Por más que las argentinas siguieron insistiendo y contaron con varias ocasiones, la defensa china respondió con solvencia. “Este partido cambia mucho para ambos. Fue muy intenso y le tocó ganar a China, pero sólo porque marcaron un gol más en el peor momento de juego nuestro”, comentó el entrenador Sergio Vigil, al analizar el encuentro.
Cecilia Rognoni hizo una lectura muy parecida a la del técnico. “Ha sido un partido muy difícil, corrimos mucho, atacamos mucho y también defendimos”, comentó Rognoni. “Este era el único partido que podíamos perder. Sabemos lo que es China. Es un equipo duro, siempre les pudimos ganar, pero esta vez se nos escapó por un gol”, indicó la defensora argentina. “Si queremos llegar a lo más alto hay que ganar todos los partidos. Nos da mucha bronca, no nos gusta perder, pero hay que seguir adelante”, dijo Rognoni, la mejor jugadora del mundo en el 2002.
Con la caída concretada, la mente de las chicas ya está focalizada en el próximo encuentro ante las holandesas, que vencieron 1-0 a Australia y ganaron invictas la otra zona. “Más allá de la derrota, hay que pensar en la semifinal. Estamos entre los cuatro mejores del mundo, pero tenemos bronca por nosotras mismas, porque queríamos ganar y terminar primeras en el grupo, pero siempre de los errores se aprende”, señaló Magdalena Aicega, la capitana del equipo argentino.