FúTBOL › SE VIENEN SEIS FECHAS DE ALTA TENSION
Empieza la rueda final
Por Juan Jose Panno
Ahora dicen que empezó otro campeonato, y tienen razón los que lo dicen porque se achicó la diferencia entre Boca y los que lo persiguen, y se achicó Boca propiamente dicho y se achicarían sus posibilidades si la lesión que sufrió Tevez lo margina de los próximos encuentros. Hasta hace poco se suponía –casi todo el mundo futbolero lo suponía– que el de Boca era un cómodo paseo hacia el título; ahora queda claro que deberá recorrer un camino sinuoso, en un terreno minado en las seis fechas que faltan. El equipo de Bianchi tiene que jugar con River (V); San Lorenzo (L), Quilmes (L), Arsenal (V), Olimpo (L) y Colón(V). Si en las próximas tres fechas juega en el nivel de la primera parte del torneovolverá todo a la normalidad pero es muy difícil, que Boca logre sin Tevez lo que fue capaz de conseguir con éste en la cancha. San Lorenzo, beneficiado por la manito que le dio el equipo Cerrojo de Avellaneda, quedó a dos unidades de la punta de la tabla y deberá enfrentarse con Colón (V), Boca (V), Banfield (L), Gimnasia (L), Central (V) y Vélez (L). El principal enemigo de San Lorenzo más allá de todo es su propia irregularidad. Habrá que ver cómo resisten la presión que significa quedar a un paso de la punta sus jugadores más jóvenes. Central, por su parte, tercero a 3 puntos de Boca, tiene estos rivales: Arsenal (V), Olimpo (L), Colón (V), San Lorenzo (L), Gimnasia (V) y Banfield (L). El fixture parece favorecerlo porque los próximos rivales son a priori accesibles, aunque no se debe olvidar que inicia este tramo final con 3 puntos menos que Boca y 1 menos que San Lorenzo.
El campeonato, queda claro, se abrió muchísimo y se podrá disparar en cualquier dirección si en los partidos clave los árbitros dirigen como lo hizo Gabriel Brazenas, quien cometió errores muy graves como dejar pasar dos claros penales en favor de Independiente y permitir que le pegaran con saña a Tevez. En el arranque Benito le tiró abajo como para partirlo y el árbitro no sólo no sacó la amarilla sino que ni siquiera cobró la falta. Un rato más tarde Benito volvió a apuntar a las piernas de Tevez y lo sacó de la cancha, a cambio de una módica tarjeta amarilla. Los inesperados movimientos de la tabla en las dos últimas fechas le dan otra dimensión al Superclásico del domingo. River está demasiado lejos, pero con tal de ver cómo se baja Boca de la punta sus hinchas son capaces de rezarle a San Lorenzo.
Empezó otro campeonato. Seguramente será más apasionante y caliente que el que acaba de terminar. Lo más probable, eso sí, es que sea igual de mediocre.