LO QUE SE DIJERON DOMINGUEZ Y LA MOLE MOLI
Después de las piñas, flores
Por D.G.
Las declaraciones posteriores a la pelea ratificaron que el encono de la semana entre Domínguez y Moli había sido prefabricado con fines promocionales. Uno se cansó de tirarle flores al otro. Y esto dijeron:
- “Yo estaba muy veloz para mi peso y ésa fue la clave de la pelea. Mentiría si dijera que le sentí la mano a Moli. Pega fuerte porque es grandote, pero nunca me movió. Yo no le di ángulo para que me conectara una mano clara. Los que se creían que yo no iba a poder aguantar los 120 kilos de Moli se equivocaron” (Domínguez).
- “Perdí bien y no tengo de qué quejarme. No me gusta haber perdido como perdí y ahora ya quiero la revancha; si fuera en el Luna, mucho mejor. Peleé tres veces en Buenos Aires y nunca me trataron bien como ahora” (Moli).
- “Lo dije en la semana y ahora lo repito. Como pesado, no peleo más en la Argentina. Mi idea es irme a pelear a Europa y, si fuera posible, buscar alguna oportunidad por el título mundial de los cruceros. Yo no soy pesado” (Domínguez).
- “La única mano fuerte que le sentí fue la del último round, cuando me pegó en la nuca y me tiró contra las sogas. Después tampoco le sentí la mano a Marcelo” (Moli).
- “Yo no creo que Fabio haya tenido a la gente en contra. Era lógico que me alentaran a mí porque soy de Buenos Aires, pero de ninguna manera me creo un ídolo. Creo que pesaron la trayectoria y las diez peleas que hice por un título del mundo. Si en vez del Luna, la pelea se hubiera hecho en Córdoba, lo hubieran ovacionado a él y a mí me hubieran dicho de todo” (Domínguez).
- “Voy a descansar una semana y voy a volver al gimnasio porque una derrota no es la muerte de nadie. Voy a seguir peleando para recuperar el título argentino y mi manager, Sodero, quiere llevarme a Estados Unidos porque no queremos pelear más con todos a los que les ganamos antes” (Moli).
- “A Moli lo sobrepasé con experiencia, hablándole, tratando de ponerlo nervioso. Siempre hubo una mano más de mi parte. Gané la pelea porque, arriba del ring, siempre sé lo que quiero” (Domínguez).