Domingo, 22 de mayo de 2005 | Hoy
NOTICIAS DEL MUNDO
Elena Poniatowska (foto), Carlos Monsiváis y Paco Ignacio Taibo II, entre otros escritores mexicanos, participarán de un programa de capacitación que la policía mexicana dispone para sus agentes, con la intención de ayudar a mejorarles “el nivel cultural”, según se ha reconocido. Los escritores forman parte de un programa llamado “Literatura siempre alerta” que funciona en el superpoblado municipio de Ciudad Nezahualcóyotl, al este del Distrito Federal mexicano. El intendente Luis Sánchez Jiménez, del Partido de la Revolución Democrática, expresó que el objetivo es que los escritores “hablen de su trabajo y de la importancia de la literatura en la vida personal” para que “los policías de esta localidad lean obras que los humanicen y los hagan mejores ciudadanos”. Y siguió hablando: “Los policías figuran entre los trabajadores con menor nivel de instrucción del país”, a la vez que advirtió que “queremos que sean firmes con el delincuente pero que también sean amables con la ciudadanía, que sean atentos, rectos y, por qué no, cultos”, agregó el bien intencionado intendente. Por último, consideró que los policías “no son analfabetos”, lo que aliviana de un modo considerable el trabajo que les espera a Poniatowska, Monsiváis y compañía.
Algunas de las ventajas de ser papa: el flamante Benedicto XVI se convirtió en un best-seller en Estados Unidos. Según informó la editorial Ignatius Press –que edita al panzerkardinal desde hace 25 años–, se han reeditado más de 300.000 copias de sus libros y se vendieron en pocos días. Mark Brumley, presidente de la editorial, aseguró que “este papa es el único que ha sido tan prolífico antes de convertirse en papa” y añadió que “la mayoría de las veces no coincide que un hombre elegido papa haya escrito tres docenas de libros, como ocurre con Ratzinger”. Entre las obras más vendidas está Sal de la Tierra, una entrevista efectuada a mediados de los noventa, y el primer volumen de sus memorias. Si Ratzinger logra que las masas lean teología, y no que sólo compren sus libros, ya podrá acreditar uno de los milagros necesarios para su canonización.
El dramaturgo y poeta español Fernando Arrabal presentó su último libro al que eligió titular Houellebecq! y al que no dudó en calificar de “una joyita”. Arrabal, quien vive en París desde hace 50 años, se quejó de su país: “En España no me toman en serio porque piensan que soy un joven provocador”, dijo Arrabal, de 72 años, ante los periodistas reunidos en su casa-museo de París con motivo de la presentación del libro, quizás un homenaje al autor de Plataforma (y amigo).
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