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LA CASA DEL CURRY

Conquistas y colonizaciones mediante, los curries viajaron en tiempo y espacio desde la India y el sudeste de Asia a la Inglaterra contemporánea. Y, desde allí, de la mano de James y Gustavo, llegaron a Mash, en San Telmo.

Mash no es estrictamente un estreno: en realidad, existe hace unos años, pero acaban de mudarlo a casa nueva, más grande, con capacidad para unos 30 cubiertos, algunos objetos antiguos aquí y allá , una barra y un aire familiar que se respira en la cordial –y a veces sobrepasada– atención.

James se crió detrás de la barra de un pub, y desde allí adquirió el gusto por estos guisos especiados, frecuentemente picantes, aunque casi todos graduables al paladar porteño. Se puede comenzar por las onion bhajis ($94), una abundate porción de aros de cebolla rebozados y fritos, acompañada de chutney de tomates. Si bien la casa ofrece una ensalada de pollo tandoori o beef bourguignon como opciones, el fuerte son los curries, que salen en porciones abundantes, acompañados de un generoso cuenco de arroz basmati perfectamente graneado y pan nan preparado en el momento.

Mash ofrece 15 variedades de curries para todos los paladares. El saag, a base de espinacas y semillas de fenogreco, es suave y sale con cordero, pollo, vegetales o camarones ($198/$183). El beef vindaloo, en cambio, se advierte como muy picante y cumple. Lo sirven con papas y huevo que mitigan el ardor. Otra opción es el cambodian pork ($198), con cítricos, tamarindo, pimientos y leche de coco, untuoso y ácido a la vez. Del lado de los postres, la apuesta es más golosa y bien ejecutada: apple crumble, tarta de chocolate o panque de banana caramelizada.

Los domingos suman platos especiales ideales para expats nostálgicos de Londres: fish & chips, club sandwich y un prometedor sunday roast: ojo de bife horneado servido con vegetales, yorkshire pudding y gravy ($220, tal vez el único lugar de la ciudad donde comer gravy).

Con la temporada de guisos a la vuelta de la esquina, no es una mala idea darse una vuelta por Mash a reponer calorías.

Mash queda en Defensa 1338. Horario de atención: martes a sábados de 19 a 24, domingos de 13 a 16. Teléfono: 15-6829-6929.

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INSPIRACION NORDICA

Por fuera, es una esquina más de Palermo. Por dentro, en cambio, el ambiente trash plagado de stencils ataca directo a los sentidos. Aires industriales, mesas sin vestir, paredes despojadas con ventanales a la calle y uno de los baños más originales de la ciudad. Todo eso y mucho más es Söder, el restaurante de Isidoro Dillon, cocinero argentino que vivió casi dos décadas en Suecia y trajo desde allá algunas costumbres y sabores. Para lograr su particular estilo de cocina, Dillon utiliza técnicas de larga data, como fermentaciones bajo tierra, materiales como barro y fuego de leña en lugar de gas. El resultado es una cocina muy personal, con sabores intensos y límpios.

El restaurante presenta dos momentos claramente distintos. Los mediodías se ofrecen platos a la carta, algunos de ellos muy logrados, como el borsh frió con helado de aquavit ($90), delicioso y con un balance perfecto de texturas y temperaturas. Isidoro maneja a la perfección los pickles, acompañando una trucha ($175) apenas tibia y ahumada a buena distancia de las brasas. También hay un ojo de bife madurado y otros platos que cambian a lo largo de las estaciones.

Por la noche, punk ambiental mediante, el lugar se transforma y la comida también. De jueves a sábado se sirve en exclusiva un menú por pasos, que no es precisamente económico ($600), y va saliendo de la cocina a un ritmo constante, sin esperas ni apuros. Carnes curadas, pescados enterrados y fermentados, ajíes rellenos con chocolate son algunos de los platos, enmarcados en lo que puede llamarse la “nueva cocina nórdica”, que irán desfilando a lo largo de la noche, algunos mas logrados que otros, pero todos con la impronta del cocinero. No se trata de un capricho suyo, sino de una manera de ver la cocina y el acto de comer.

Lugar para paladares intrépidos, Söder será sin dudas una de las mejores noticias gastronómicas de 2016. Vale la pena abandonarse en manos de Isidoro y disfrutar de los sabores que propone.

Söder queda en Honduras 5799. Teléfono: 4778-7025. Horario de atención: martes a sábados de 12 a 16; jueves a sábados de 20 al cierre.

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SABOR MARROQUI

Un homenaje. Así lo pensaron los primos Nicolas Wolowelski y Juan Martin Migueres cuando le pusieron nombre a su nuevo restaurante. Benaim es el apellido de la abuela marroquí de ambos, de ascendencia judía, y cuyos antepasados habían fundado la fábrica de dulces “Duci”, una de las mas tradicionales de Marruecos. La familia luego se instaló en Argentina, y hace décadas que se dedica en gran medida a distintos aspectos de la gastronomía.

El local, con apenas semanas de vida, ofrece bocadillos populares de la gastronomia de Medio Oriente, ideales para comer con las manos, en un ambiente descontracturado y a precios más que accesibles.

Instalado en una vieja casona, la fachada es ocupada por un gran mural realizado por el artista Cabaio Spirito. Traspasado el portal, aparece un enorme patio con mesas comunitarias. A la izquierda de la entrada, estacionado, un camión con cuatro canillas de cerveza artesanal espera por ser pronto inaugurado. También, prometen, irá recibiendo a bartenders invitados que despacharán sus tragos desde la ventana del camión.

Hay cuatro opciones principales a la hora de decidir qué comer. El sandwich de pastrami sale en un enorme pletzalej con abundate mostaza y pepinos perfectos. El pastrón, que se elabora in situ con una salmuera de varios días, se deshace en la boca. La oferta la completa un generoso kebab bien cargado, kipe frito y unos maravillosos falafel envueltos en pan lavash (todos los platos, entre $110 y $90, se sirven con papas fritas).

Para acompanar, son muy sabrosas las cervezas Siete Colores, con variedades como la Scotish y una Pale Ale, aunque en breve prometen ampliar la oferta.

El ambiente informal y descontracturado y la amplitud del horario de cocina convierte a Benaim en una buena opción tanto para unas cervezas a la salida del trabajo como para una cena tardía, inlcuso bien pasada la medianoche. Una cocina inmigrante, hecha con respeto y con pasión.

Benaim queda en Gorriti 4015. Teléfono: 4775-6947. Horario de atención: lunes a jueves de 19 a 0:30; viernes y sábados de 18 a 3.

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Fotos: Pablo Mehanna