El gobernador Hermes Binner se mostró ayer golpeado políticamente por el rechazo en el Senado de la reforma tributaria, lo que le impedirá sumar nuevos recurso al presupuesto 2009. En ese marco reconoció que su plan B "es llevar adelante una política de supervivencia en la que se demorarán proyectos importantes como escuelas y hospitales". El mandatario provincial se mostró escéptico en lograr una respuesta distinta del peronismo "porque para dialogar hacen falta dos" dando por sentado que la oposición no tiene voluntad de dialogar.

Binner comenzó ayer la rueda de prensa con una valoración sobre la jornada políticamente más difícil de su gestión. "Hicimos lo que debíamos hacer: formular una propuesta después de 18 años de estancamiento en los ingresos públicos vinculados a los ingresos por impuestos, generar una política que permita ingresos de los que más tienen. El neoliberalismo ha gobernado con un Estado ausente y le dio todo al mercado. Prueba de ello es lo que está pasando hoy en el mundo. Es la caída estrepitosa de un modelo. Esta política ha determinado que en nuestra provincia creciera la mortalidad infantil y si queremos corregir esto necesitamos hacer más hospitales, más escuelas, más fuentes de trabajo, más integración social y esto se logra con presupuestos que permitan que aquel que más tiene pueda contribuir con más y el que menos tiene, tenga que contribuir con menos o no tenga que contribuir.

--¿Cómo sigue su gobierno sin la aprobación de esta reforma?

--Se pueden dar dos situaciones: que ingresemos en una nivelación más alta o una nivelación más baja. Evidentemente el Senado elige entrar en una nivelación más baja. Vamos a gobernar así, pero no creamos que estos ingresos van a permitir doblegar la pobreza que hoy tenemos en la provincia de Santa Fe. Esa pobreza impide el desarrollo económico de todo pueblo. No hay ningún caso en el mundo con niveles de desigualdad social como tiene Argentina -como bien lo marca Bernardo Klisberg- que hayan logrado el desarrollo económico y el progreso social. Debemos atender a lo que han quedado excluidos de la mesa del festín neoliberal que está terminando, generando políticas inclusivas que permitan que la sociedad pueda vivir con decoro.

--¿El senador Zabalza habló en un golpe de estado en el Senado?

--No sé a qué se refería.

--A la actitud del justicialismo de rechazar la reforma...

--Es una dificultad para poder ingresar a un mundo más democrático e inclusivo. Esto es así. Esto es como una casa, como en un club, como en una pyme, todo tiene que ver con lo que ingresa para poder pensar en los gastos.

--¿No hay diálogo para revertir esta situación? ¿Hay plan B?

--El plan es seguir con estos presupuestos bajos, haciendo política de supervivencia. Pero si no aplicamos políticas activas para hacer nuevos hospitales, hacer nuevas escuelas, vamos a seguir viendo cómo aumentan el índice de enfermedades infectocontagiosas, está aumentando la mortalidad infantil, está aumentando el grado de exclusión a partir de la educación y de la cultura. Porque la pobreza no es solo ganar diez centavos más de lo que dice el Indec para no ser pobres, la pobreza tiene que ver con lo cultural, lo social, tiene que ver con lo educativo.

--¿Pero no puede destrabarse con diálogo político?

--Para dialogar hacen falta dos.

--¿Cuál es la posición que puede llevar a esa mesa de diálogo el Frente Progresista?

--Mi opinión es que no tiene porqué intervenir en otro poder como el Parlamento, porque allí están representados todos los partidos políticos por lo cual es allí donde tiene que haber una valoración alrededor de la situación que queremos en la provincia de Santa Fe. Y habrá gente que defiende una política y gente que defiende otra. Y esa políticas serán finalmente conocida por la población.

--¿No hay posibilidad de aprobar en Diputados el proyecto del Senado para otorgar una quinta cuota del inmobiliario a los municipios y comunas?

--Es factible para descomprimir una circunstancia en este momento, pero estamos hablando del Presupuesto 2009, no del presupuestos del 2008. El presupuesto del 2009 tiene que ver con una propuesta para hacer hospitales, escuelas que se harán pero prolongadas en el tiempo. Mientras en ese tiempo que va transcurriendo, no olvidemos que hay chicos que se van a morir, otros que no irán a la escuela, gente que se va a hundir en la exclusión social.

--¿Quién es el responsable de esta situación?

--Y, todos somos responsables. Lo que hago es pintar una realidad. En estos diez meses que estamos en el gobierno nos llevamos muchísimas sorpresas estando adentro, porque la realidad no es como la pintan aquellos que quieren pintar todo de rosa. Entonces, actualizar toda la demanda de los convenios laborales, de la policía, de los bancarios excluidos el Banco de Santa Fe, de los maestros, de toda la gente que está haciendo incursiones judiciales en contra de la provincia, todo esto significa dinero. Lo estamos viendo y resolviendo. Por ejemplo la deuda que tiene la provincia con los municipios desde la época de (Juan Carlos) Mercier por no haber pagado lo que correspondía por coparticipación a municipios es extraordinaria: solo Rosario tiene una acreencia de 80 millones de pesos. Hay que resolverlo, y vamos a hacerlo. De eso sabemos porque gobernamos la ciudad de Rosario en la peor crisis que vivió el país en el año 2001, y en ese momento hicimos una política de familia que se achica en los ingresos, de buscar por todos los medios de incorporar ahorros, para salir a adelante. Asi que estamos en condiciones de hacerlo.