El intendente de Pérez, Darío Corsalini anunció ayer que dos empresas contratistas "me confirmaron que avanzaron en los contratos con Gerdau para iniciar los movimientos de tierra", en el predio en el que la gran acería brasileña (Sipar-Gerdau) piensa invertir más de 500 millones de dólares en la ampliación de su planta en esa localidad. Para Corsalini, este es un signo inequívoco de que "la inversión sigue avanzando", a pesar de que la empresa había anunciado sobre fin del año pasado que suspendía el proyecto "debido a la incertidumbre que plantea la crisis internacional".

"Para nosotros fue una gran alegría recibir esta información de parte de estas empresas contratitas que son las que iniciarían los primeros trabajo en la ampliación de la planta Sipar-Gerdau", dijo ayer el intendente Corsalini en declaraciones a LT8. Y aseguró que "si bien no hemos tenido una comunicación oficial de la empresa, está claro que por lo menos la primera etapa del proyecto sigue en marcha". El funcionario consideró a esta inversión como "histórica y una de las más importantes de las últimas décadas no sólo para Pérez, sino para toda la región y también la provincia".

En el mes de noviembre, el grupo brasilero Gerdau había confirmado -pocos días después del anuncio de la gran inversión- que "debido a las incertidumbres económicas del período, la empresa está revisando el cronograma de implantación de sus inversiones para los próximos años", el cual "será analizado y ajustado de acuerdo con la nueva realidad de los mercados". Y, obviamente, esa decisión empresaria afectaba al más importante de todos estos proyectos: La ampliación de la planta industrial de Pérez, con una inversión de 524 millones de dólares y la creación de miles de empleos. Ahora, esta situación podría cambiar a partir del adelanto que hizo ayer el intendente Corsalini. Desde finales de 1999 Gerdau tiene en sus planes convertir la planta de Pérez en una acería de ciclo completo, para lo cual es indispensable la inversión mencionada.