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"No tengo la bola de cristal pero presumo que la mayoría de los votos del Frente Progresista que fueron hacia los otros candidatos en la interna, nos seguirán acompañando para las elecciones de julio", planteó ayer el candidato a gobernador del Frente Progresista, Antonio Bonfatti, tras el cónclave que mantuvo el lunes en Santa Fe con sus otrora rivales de la primaria abierta. El ministro de Gobierno admitió que una parte de sus posibles votantes opten por Cristina Kirchner si se presenta a la reelección. "No hay que esconder la realidad, puede haber un voto cruzado, de parte de gente que esté de acuerdo con nuestro gobierno provincial pero que a la vez sienta una especie de confianza a nivel nacional que la lleve a votar a Cristina", reconoció.

Bonfatti celebró la realización del encuentro de unidad provincial concretado el lunes en la ciudad de Santa Fe. "Es importante que privilegiemos que el Frente Progresista debe seguir gobernando Santa Fe, gobernando Rosario y en la mayor cantidad de ciudades y pueblos posibles", planteó el ministro de Hermes Binner por LT8.

Cuando se le preguntó al candidato a gobernador del Frente si el escenario interno había cambiado teniendo en cuenta la fortaleza del radicalismo por los 200 mil votos obtenidos por Mario Barletta, Bonfatti lo relativizó: "El Frente Progresista tiene un proyecto más allá de la integración. Además si nos guiamos por la elección del 22 de mayo Barletta sacó el 31 por ciento de los votos y el socialismo (entre su candidatura y la de Giustiniani) el 69 por ciento restante. Pero no se trata de eso, la política no es una suma aritmética, no se gobierna con cuotas".

"Lo que si se viene planteando es avanzar hacia la institucionalización del Frente y en estamos todos de acuerdo. Gobernar no es un tire y afloje, sino una coherencia en un proyecto, cada cual con sus responsabilidades", agregó.