El uso del suelo es el problema de fondo. Las urbanizaciones que se han desarrollado en toda la provincia abrieron el debate sobre la necesidad de la planificación urbana para evitar el avasallamiento de los espacios públicos y la proliferación de barrios cerrados en detrimento de las zonas de uso común. En esa sintonía, el gobierno provincial estudia presentar en la Legislatura provincial una ley de ordenamiento territorial, inexistente hasta el momento. Su contenido "va a depender de un debate que todavía nos debemos", avisó la Secretaria de Regiones, Municipios y Comunas, Mónica Bifarello. En diálogo con Rosario/12, el presidente de la Comisión de Vivienda y Urbanismo de la Cámara de Diputados, Oscar Urruty, celebró el adelanto, pero recordó que el año pasado el Senado dio media sanción a un proyecto similar. No obstante, coincidió en la necesidad de regular este modelo del mercado inmobiliario.

En un acto de campaña en la ciudad de Funes, el intendente rosarino y candidato a senador departamental por el Frente Progresista Cívico y Social, Miguel Lifschitz, anunció que en caso de obtener la banca avanzaría en una norma "que establezca pautas y parámetros para las nuevas urbanizaciones tanto en Rosario como en toda la Región Metropolitana". En los últimos meses, el jardín de la provincia ha cobijado varios emprendimientos, barrios cerrados y abiertos residenciales, y es un caso testigo a la hora de debatir la problemática. Lifschitz habló de "regular" las nuevas urbanizaciones de tal manera que el desarrollo de las ciudades "no sea caótico, desordenado y no tenga consecutivas negativas en el futuro desde el punto de vista hidráulico y del uso del suelo".

Para darle un marco al crecimiento inmobiliario, la provincia se encuentra realizando estudios propios y comparaciones con la legislación de otras provincias y leyes de distintos países a nivel nacional. "Pensamos en el tema de preservar el espacio público, que contenga principios del hábitat. Si se hacen nuevas urbanizaciones que se garantice la cuestión de la infraestructura, un adecuado uso del espacio", explicó Bifarello, al tiempo que consideró como "fundamental" la defensa del medioambiente. Antes de su presentación en la Legislatura, el Ejecutivo pretende entablar un debate "más amplio" con distintos actores. Ya se reunieron con "algunas" organizaciones de la sociedad civil, el Colegio de Arquitectos de Rosario y profesionales. A pesar de reconocer que el tema merece "urgencia", la funcionaria prioriza encontrar "un alto grado de consenso". Por ese motivo y teniendo en cuenta el año electoral, resulta "complicado" que ingrese a la Legislatura antes de fin de año.

Bifarello cree que algunos municipios y comunas han incurrido en una "falta de planificación" a la hora de aprobar urbanizaciones. Sin embargo, estima que "todavía se puede avanzar mucho más". Una ley de ordenamiento territorial serviría para resguardar el uso del espacio público, pero no impondría condiciones a las localidades. "Hay cosas que no pueden pasar sobre la autonomía municipal, nosotros tenemos autonomía en los municipios y desde la Provincia no podemos imponerle a los municipios la forma en que tienen que organizar su territorio". En ese sentido, la funcionaria consideró, desde su punto de vista, que una ley provincial no puede establecer "si el barrio privado sí o el barrio privado no" porque "eso es una potestad de cada municipio".

Al darle el visto bueno a varios barrios privados, algunas ciudades no previeron el surgimiento de problemas impensados. La falta de infraestructura básica y la prestación de servicios llevan la delantera y han provocado un "problema serio a futuro". Sin precisiones del cómo lo harán, los Estado locales tendrán que llevar "servicios, transporte, educación" a las nuevas zonas. "Ni hablar de los problemas más graves de infraestructura básica", alertó Bifarello. En algunas urbanizaciones, "después de hacerlas y de lotear y vender", apareció el problema de que "no estaba planificada la cuestión de la electricidad, el agua".

Si bien la mayoría de las urbanizaciones se han asentado en el Gran Rosario, los problemas se suscitan en "toda" la provincia. "Observo que los problemas son diferentes. Pero lo del medioambiente es un tema en toda la provincia, nosotros tenemos en el norte un humedal que si no hacemos una buena planificación territorial que combine los usos productivos, medioambientales y los residenciales, a la larga se deterioran", señaló Bifarello.

En Diputados, Urruty calificó de "positiva" la iniciativa. "Todo lo que contribuya a que Santa Fe rápidamente tenga una ley de ordenamiento territorial que se vaya adaptando a lo que la Nación está haciendo es bienvenido", dijo Urruty, legislador del Partido del Progreso Social. El gobierno nacional organizó "una serie de charlas y mecanismos de consulta" para elevar al Congreso una ley que regule el uso del suelo. Urruty afirma que la Provincia participó en dichos encuentros.

El 25 de agosto del año pasado, el Senado aprobó un proyecto del legislador Danilo Capitani con los criterios para fijar parámetros y disposiciones en relación "al tema de la utilización del suelo y espacio públicos tanto en áreas urbanas como suburbanas". Al enterarse de la iniciativa del gobierno, Urruty le espetó a la Provincia que vuelve "a repetir un viejo mecanismo". Ante cualquier iniciativa presentada en las Cámaras "dónde ve que queda relegado", el Ejecutivo intenta "poner un proyecto propio rápidamente". Urruty tiene la "intención" de sancionar antes de fin de año la iniciativa de Capitani.

Tras recibir la media sanción del Senado, la Cámara baja comenzó a consultar con colegios de profesionales y entidades intermedias a fin de lograr un "debate profundo". Urruty llegó a la conclusión de que "no todos" los municipios y comunas tienen la "capacidad" de realizar planes de ordenamiento territorial propios. "Lo pueden hacer los de primera categoría, como Santa Fe y Rosario, y con algunas dificultades, otros como Rafaela y Reconquista, pero sin dudas resulta dificultoso para los más chicos", sostuvo el diputado provincial.

En sintonía con las apreciaciones de Bifarello, Urruty tampoco pretende "condicionar" a los municipios, pero una nueva ley servirá para disponer de herramientas "mucho más activas" a la hora de planificar el territorio y las ciudades. Para el diputado kirchnerista hay que "avanzar" también en algún "retoque" en la Constitución sobre la propiedad social de la tierra.