El gobierno de la provincia de Santa Fe lanzó un plan de obras públicas en todo el territorio, en el cual invertirá más de 520 millones de pesos, con el objetivo de recuperar más de 10 millones de hectáreas para la producción. El programa, de infraestructura hídrica y vial, incluye bajos submeridionales, rutas, puentes con mayor luz sobre el río Salado y las obras en las lagunas La Picasa y Melincué.

El saneamiento hídrico de los bajos submeridionales ﷓en la reserva ganadera más grande del país﷓ permitirá recuperar 3 millones de hectáreas, con una inversión superior a los 21 millones de pesos. En el corredor del río Salado, se construirán siete puentes, con aliviadores y accesos, una ruta y las obras de la avenida circunvalación oeste y el acceso norte de la ciudad de Santa Fe.

Allí se invertirán 200 millones de pesos para asegurar la transitabilidad de rutas y caminos pero fundamentalmente destinadas a evitar las inundaciones. En las rutas 168 y Costera 1 se están desarrollando trabajos de reparación y ampliación. La ruta provincial 31 permitirá recuperar 5 millones de hectáreas y ahorrar más de 47 millones de pesos en fletes. Son 150 kilómetros desde Intiyaco hasta la ruta nacional 95 que conecta con Santa Margarita.

La inversión alcanza a los 52 millones de pesos, y los primeros trabajos ya han permitido, en un tramo de 17 kilómetros, abrir la traza entre los parajes de "Flor de Oro" (distrito Lanteri) y "Cuatro Bocas" (jurisdicción de la localidad de Ingeniero Chanourdié). Otra de las obras será la ruta 7, a la altura de La Picasa, abierta en forma precaria al tránsito, tras ocho años de estar interrumpida como consecuencia de haber sido alcanzada por la gran

inundación que generó el agua que desbordó la laguna.

También se destinarán 145 millones de pesos para la recuperación de las vías del ferrocarril San Martín, que corren paralelas a la ruta 7.

Además, se construirá un pedraplén de 7 metros con enrocado de protección en toda su longitud, para llevarlo a cota no inundable.

La evacuación de la Laguna La Picasa facilitará la recuperación de 230.000 hectáreas de la Cuenca y de las superficies extra﷓cuenca adyacentes al lugar de emplazamiento del canal, como los distritos Christophersen, María Teresa, Diego de Alvear, San Gregorio y Teodelina. Con el funcionamiento de una estación de bombeo y un canal interlagunar ﷓alternativa norte﷓ ya bajó 30 centímetros el nivel de las aguas y se recuperaron 2.500 hectáreas. Este nivel de bajante se incrementará notablemente cuando se habilite el canal alternativa sur.

La inversión para toda la gran obra supera los 91 millones de pesos.