La Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) resolvió intervenir la Junta Electoral de Ñuls, al probarse las irregularidades denunciadas por la oposición en la pasada asamblea del 15 de mayo. La disposición firmada por Pablo Clement no tiene ingerencia respecto al orden administrativo del club y la designación del doctor Andrés Hugo Brelich como interventor tiene el fin de fiscalizar, con poder de veto, el trabajo que desempeñen desde entonces los miembros designados en la polémica asamblea para organizar los comicios de diciembre. La medida eleva expectativas en cuando a la posibilidad de que los leprosos vuelven a tener las urnas como lugar de expresión.

En rigor, la resolución Nº 642 rubricada por Clement tiene matices contradictorios, puesto que en la misma se relata con puntilloso detalle las irregularidades producidas, pero a su vez ratifica la composición de la Junta Electoral. Y consecuencia de ello se dictaminó la inclusión de un interventor como sexto miembro de la Junta.

En los considerandos el responsable de IGPJ dejó constancia de las maniobras denunciadas por más de 150 socios que no pudieron ingresar el recinto deliberativo. "Los veedores designados por esta Inspección (..) no visualizaron que existieran oficinas habilitadas para recibir el pago de cuota por aquellos que pretendieran regularizar su situación". "Los veedores de la asamblea confirmaron que estaban incluidos en el libro de registro de asociados" a quienes se les negó el ingreso a la asamblea.

En el punto 12 de la argumentación, Clement rescata: "Es deber de los administradores de la asociación no abusar de las facultades estatutarias por cierta aplicación oportunista (...)". En el apartado siguiente concluye que "la prohibición del ingreso a la asamblea ha menoscabado un relevante derecho corporativo de los asociados y a la vez ha frustrado una racional integración de la voluntad colectiva pues, sin conjeturar sobre las consecuencias aritméticas de los sufragios desestimados, ha impedido la participación de un considerable número de asociados". Por último, en la resolución se enfatiza que "los administradores no pueden ejercer sus atribuciones sin exponerse a una inspección del órgano de fiscalización ni sufrir su competencia correctiva".

Por todo ello, Clement diagnostica que "los defectos advertidos impelen a esta Inspección General a adoptar medidas para encauzar las acciones de las asociación, reparar las secuelas de las irregularidades y evitar eventuales exclusiones de sectores de asociados del proceso electoral en marcha".

En consecuencia, IGPJ resolvió "intervenir la Junta Electoral" de Ñuls, pero "sin desplazamiento de sus miembros". El interventor nombrado, Andrés Brelich, formará parte del órgano electoral conformado por Carlos Preconi, Alicia Bianchi, Juan José Galván, Rubén San Juan y Francisco Arcando. Brelich, quien tendrá como suplente a la doctora Silvia Nora Ferranti, deberá asistir a todas las deliberaciones del órgano, donde allí podrá: "rectificar o rechazar cada decisión", "ordenar consideraciones pertinentes", "examinar documentos" y "solicitar informes", atribuciones concedidas para que "se asegure las garantías de imparcialidad de los agentes del comicio y restituya la confianza de los asociados".