La Asociación Rosarina de Fútbol (ARF) desafilió a Central en todas sus categorías por un mes, al no participar el club de Arroyito en las reuniones semanales. La entidad que nuclea el fútbol amateur en la ciudad intimó a los directivos a que presenten a algunos de sus dos delegados nombrados, algo que ocurrió solo en una ocasión y una vez impuesta la sanción. La semana que viene se inician la competencias en todas las categorías y los chicos de las inferiores canayas podrán jugar, pero el club no sumará los puntos que gane dentro de la cancha. "Desde noviembre que Central no tiene representación en la Rosarina. No viene ninguno de los delegados", aseguró uno de sus directivos de la ARF.

La entidad que preside Mario Giammaria desafilió a Central por 30 días, suspensión que rige desde el 28 de febrero y concluirá el 28 del corriente. La drástica determinación fue tomada por las autoridades de la Rosarina al agotarse todas las instancias de diálogo para lograr la asistencia de los delegados auriazules en las reuniones de cada jueves, donde los clubes afiliados debaten y coordinan los torneos superiores, como así también la situación del fútbol juvenil y el baby.

Las autoridades de la Rosarina advirtieron vía telefónica a los canayas de su ausencias en las reuniones semanales el pasado mes de diciembre. Al no corregir la actitud la institución de Arroyito, Giammaria dio curso a una carta documento, que los auriazules respondieron prometiendo recuperar su representación en los encuentros con sus pares de los clubes de la ciudad. Pero los delegados canayas siguieron sin acudir al cónclave de los jueves, por lo cual la ARF resolvió desafiliar a Central por 30 días. Una vez notificada la suspensión Central envió a su representante, pero a la semana siguiente volvió a ausentarse.

La desafiliación no tiene carácter retroactivo, por lo cual Central podrá jugar ante la Asociación Atlética Jorge Griffa la semifinal del Ivancich. Pero la semana que viene, cuando comiencen las competencias en el fútbol juvenil, el baby y los torneos superiores, ninguna de las divisiones auriazules --el canaya tiene equipos en División A y B-- sumarán los puntos que ganen en la cancha. "Se hizo todo lo posible para evitar una suspensión y no hubo caso. Es llamativo que un club como Central desatienda el fútbol juvenil", lamentó un directivo de la Rosarina en diálogo con este diario.