A Ñuls le dio un título que he hizo trascender el nombre de la institución con su sola firma de contrato. Pero en el parque Independencia su presencia ya no es motivo de satisfacción. Y con el mismo esfuerzo que ameritó su adquisición, ahora los dirigentes buscan sellar su transferencia. De un año a esta parte, Eduardo López quiere venderle a River a Ariel Ortega. Y ahora que en Núñez preguntaron por Fernando Belluschi, el mandamás leproso puso como condición de la negociación incluir en la operación al Burrito. Entre tanto, otros agitan la chance de que la estrella rojinegra aterrice en Boca.

En las últimas horas volvió a circular un rumor que vinculaba a Ortega con Boca, fomentado también por la amistad que une a López con el titular xenieze, Mauricio Macri. Pero al ser consultado por este diario, un colaborador a la Comisión Directiva de Boca realizó una singular lectura de lo sucedido: "En Boca jamás pensaron en Ortega. Lo que pasa es que en Ñuls están desesperados por vender al jugador. Y para asustar a la gente de River se lanzan estas versiones disparatas".

Los voceros de López afirmaron ayer que Ñuls le debe al Fenerbahce de Turquía 1.500.000 euros por el pase de Ortega. Con lo cual River debería hacerse cargo de esa deuda y además negociar con los rojinegros la tasación de su pase. Pero como condición los rojinegros exigen incluir en la negociación a Belluschi, refuerzo señalado como "prioritario" por el técnico Daniel Passarella, configurando así una operación que treparía los 6 millones de dólares para la entidad que preside José María Aguilar.

Pero en River los ojos están puestos en Sebastián Verón, quien ayer anunció su decisión de abandonar el Inter de Italia para volver a residir en el país. Y la Brujita, cuyo pase pertenece al Chelsea de Inglaterra, cuesta lo mismo que la suma que Ñuls le debe a los turcos: un millón y medio de euros. Y entre recuperar al ídolo y lograr la adquisición del ex jugador de Estudiantes, los millonarios priorizarán la segunda opción.

La venta de Ortega podrá resolverse recién luego del Mundial de Alemania. Pero el club no esperará hasta julio para insertarse en el mercado de pases a la búsqueda de refuerzos. Nery Pumpido pretende sumar a un jugador por línea. En caso de ser transferido Ignacio Scocco, el nombre apuntado para su reemplazo es Bruno Marioni, quien se desvinculó de los Pumas de México y tiene el pase en su poder. Pero el punta que se formara en las inferiores leprosas también es pretendido por Jorge Burruchaga para volver a Independiente.

Aunque antes de pensar en invertir algún billete los leprosos están a la concreción de una transferencia, debido a que por Federico Laurito, vendido a Udinese de Italia con 16 años, aún no ingresó un sólo euro. Y además de Ortega, López intenta desprenderse de Fernando Belluschi y Germán Ré, aunque en Ñuls todos los jugadores están en vidriera y a disposición de quien pague por su cotización.