Con poco menos del 50 por ciento de los votos, pero frente a una oposición que sorprendió por el respaldo que recogió en las urnas, Pablo Scarabino obtuvo ayer la reelección en la presidencia de Central. Casi un millar de sufragios fue la diferencia que separó al oficialismo de la agrupación opositora Canallas por la Recuperación Centralista (Crece), que se alzó con algo más de 2200 votos. Relegada al último lugar, con algo más de mil sufragios, apareció Unidad Canalla que postuló a Osvaldo Rodenas como candidato a presidente. Para sorpresa de las tres agrupaciones, más de 6500 socios participaron de los comicios. "Tenemos una buena oposición", reconoció Scarabino, quien gobernará en Arroyito hasta agosto de 2010. "Pero la mayor satisfacción es saber que desapareció el pasado funesto de Central", disparó el reelecto presidente, en clara referencia a la lista que respaldó Víctor Vesco.

Los números se conocieron pasadas las 20. Durante el escrutinio nunca se puso en duda al triunfo oficialista. Hasta que aparecieron los guarismos de las mesas donde votaron los activos y nació la preocupación. Es que allí el triunfo de Crece era inobjetable, pero no le alcanzó para imponerse.

Las elecciones marcaron un récord de asistencia: participaron 6592 socios, de los cuales 3098 votos fueron para el oficialismo, 2241 para el Crece y 1186 para Unidad Canalla, mientras que 66 resultaron impugnados. La sorpresiva elección del Crece le puso algo de suspenso el escrutinio y dejó de manifiesto que un grupo de socios no está de acuerdo con el gobierno de Scarabino. El reelecto presidente tomó nota del mensaje que enviaron los números finales. "Estoy orgulloso de estas elecciones. Creo que vinieron seis mil personas, lo que demuestra la gran convocatoria que tiene Central. Estoy contento porque desapareció el pasado. El pasado mentiroso ya no existe más. Y tenemos una buena oposición, joven y que nos va a obligar a mirar mucho lo que tenemos que hacer. Me siento orgulloso porque es una oposición formada por nosotros, por esa gente que a lo mejor no coincide con nosotros, pero que es sana, limpia y joven. Mi triunfo más grande es saber que desapareció el pasado de Central. Eso es lo que más contento me pone", analizó Scarabino minutos después de que la Junta Electoral anunciara su triunfo. "La elección fue ejemplar, nadie se puede quejar de nada, excepto de algún pequeño problema con las impugnaciones. Quiero felicitar a la gran oposición que se creó en Central, que es joven, sana y salida de nuestro riñón. Me siento muy feliz y esto me obliga a dedicarme mucho más al club", apuntó el reelecto titular de Arroyito.

"Central necesita seis meses más para ponerse al día con deudas que venimos pagando desde hace tres años y que no son nuestras --agregó Scarabino--. Me dicen que yo siempre digo lo del pasado, pero no se puede gobernar si uno no tiene dinero. Demasiado sacrificio estamos haciendo. Pero dentro de seis meses Central va a estar como corresponde y va a ser el gran club que merece tener esta ciudad. Esta elección me dio mucha más satisfacción que la anterior porque gracias a ésta desapareció el pasado funesto que tuvo Central y ahora tenemos una buena oposición", finalizó Scarabino.