"Ante Boca vamos a jugar con la misma intensidad que lo hicimos en los partidos anteriores", anticipó Pablo Marini, quien luego reconoció que el plantel le "debe a la gente un triunfo de local". Es que en el Coloso del Parque los leprosos vienen de caer ante Colón e igualar frente a Quilmes. "Lo importante es que en Córdoba los jugadores superaron una prueba de carácter y personalidad porque se sobrepusieron a la adversidad que significó perder con Colón y vencieron a Belgrano", destacó el técnico rojinegro, que prevee hacer dos variantes para recibir el domingo a las 14 a Boca.

"Necesitábamos ganar para evitar que aparezcan fantasmas en el jugador y en la gente sobre lo que sucedió anteriormente (derrota con Colón). El único resultado que teníamos en mente era la victoria y creo que se dio en forma categórica", analizó Marini, luego de que concluye el primer entrenamiento de la semana.

El equipo de Marini ganó sus cuatro partidos que jugó en condición de visitante. Pero de los tres que llevó adelante en el Coloso del Parque sólo pudo imponerse ante Argentinos. "Nos debemos una victoria de local", asumió Pomelo. Aunque luego apuntó: "Hay que tener en cuenta que tanto contra Argentinos como ante Quilmes la producción fue muy buena, se crearon muchas situaciones de gol que no se pudieron convertir. Aunque contra Colón se jugó muy mal".

El domingo vendrá Boca con la ambición de recuperar la punta del torneo. Pero Marini no presta atención al presente deportivo del rival. "Como todos los partidos que enfrentamos, Boca va a ser un rival muy duro. Lo vamos a tomar de la misma manera que cuando jugamos con Colón, Argentinos y Quilmes. Hoy por hoy no hay ningún rival fácil y el domingo será un partido de la misma intensidad que los de antes", aseguró el técnico leproso. "Para todos Boca es un rival preponderante por la prensa que tiene y por lo que significa. Pero para nosotros futbolísticamente es lo mismo que cualquier otro rival", agregó posteriormente Marini.

Recién apartir de esta mañana, en Bella Vista, el cuerpo técnico rojinegro empezará a ensayar la forma en que el equipo le jugará al escolta de San Lorenzo. Al margen de ello, Marini anticipó ayer que a Juan Román Riquelme no se le hará marca personal y, por el contrario, resaltó las condiciones y el momento que atraviesa Oscar Cardozo. "Está en un nivel importantísimo. Es el referente del gol, está brindándose muchísimo, corriendo y jugando más en equipo. Pero para que llegue al gol tenemos que tener un funcionamiento colectivo en el cual todos son importantes".

La mayor dificultad que deberá resolver en la semana Marini será encontrarle reemplazante a Carlos Araujo, quien ante el pirata cordobés llegó a la quinta amarilla. Al respecto, el técnico admitió ayer que para suplir al ex Estudiantes podría aparecer Pablo Pérez, Diego Villagra y hasta Hernán Bernardello, quien dejará su lugar en el mediocampo para permitir la vuelta de Ariel Zapata. Con menos chances aparece Cristian Ansaldi.

Con lo cual al sustituto de Araujo se le agregará la vuelta de Zapata por Bernardello. Estos serían los dos únicos cambios en la alineación leprosa. Porque es intención del entrenador sostener a Martín Seri en la posición de enganche a pesar del buen rendimiento mostrado por Sebastián Arrieta al ingresar en el segundo tiempo frente a Belgrano. Y por el lateral izquierdo seguiría jugando Adrián Lucero.

Ayer no pudieron entrenar, por diferentes molestias muscular, Nicolás Spolli y Claudio Husain. Pero el médico Ignacio Astore diagnosticó que ambos jugadores se recuperarán a tiempo para poder formar parte del once leproso que esperará por los xeneizes.