En una línea de apertura que ya ha mostrado sus resultados a partir de experiencias como el festival El Cruce o el proyecto Ciudades que Danzan, esta tarde en el Patio de Verano de la Estación Parque Urquiza (Chacabuco 1371) se lanzará el ciclo gratuito "Solos y no tan solos". Impulsado por la Secretaría de Cultura municipal, el mismo tendrá al amor como eje temático y estará dedicado a la improvisación en danza contemporánea, permitiendo así el acercamiento de este lenguaje a nuevos públicos. La apertura tendrá lugar a las 19.30 con la actuación de las bailarinas Yerutí García Arocena, Irene Finkelstein y Lucía Animendi, quienes fueron dirigidas por Cristina Prates.

Y fue la propia coreógrafa quien admitió la importancia de que el género pueda abrirse a nuevos espectadores, en un proceso que han impulsado desde la agrupación de Coreógrafos y Bailarines Independientes (Cobai). "Esto empieza con todo lo que estamos trabajando con El Cruce, en la cuestión de Ciudades que Danzan, de la que ya se hicieron dos ediciones. Y no solamente con la cuestión de la improvisación sino todo lo que es danza contemporánea en espacios públicos. Por supuesto que este ciclo sirve, y esto va a seguir haciéndose, porque ahora nos llamaron a David Farías y a mí, pero cuando tuvimos la reunión con la gente de Cultura se planteó que iba a hacerse extensivo a otros coreógrafos. Me parece que justamente se está movilizando bastante la cuestión de las actuaciones en vivo de los bailarines. Fundamentalmente la gente de la danza contemporánea, que tenemos la posibilidad de ir a otros espacios", explicó.

Por otra parte, la directora resaltó la posibilidad de que el Patio de Verano vuelva a alojar espectáculos, repitiendo experiencias como la que ella misma vivenciara tres décadas atrás con Norberto Campos y el grupo El Litoral, con la puesta en escena de Inodoro Pereyra, el renegáu. "Ayer estuvimos ensayando ahí y es un espacio hermoso. En ese lugar nosotros hicimos Inodoro Pereyra en el año 77, y también actuamos con el grupo de danza contemporánea que tenía en ese momento, porque el Sindicato Santafesino de Trabajadores del Teatro había armado un ciclo de danza y teatro en esa antigua estación de ferrocarril. Ese lugar tiene historia, incluso en ese lugar fue Fontanarrosa a ver el estreno del Inodoro Pereyra del grupo El Litoral".

Ya en relación a las características del espectáculo con el que inaugurarán el ciclo "Solos y no tan solos", Prates apuntó: "Con los grupos que coordino y dirijo siempre trabajamos improvisando, todo el tiempo. Después montamos la obra y las cosas por ahí quedan. Hay momentos de improvisación y otros que están marcados, pero por supuesto todo sale de la improvisación de los bailarines mechado con cosas que veo en el momento". Sin embargo, y a partir de la pauta de trabajar con el amor como temática unificadora, la obra tuvo sus disparadores en poesías de Roberto Juarroz, según detalló la directora.

"Juarroz habla de la línea divisoria entre los encuentros y desencuentros, dice que cerca y lejos no existen, que los crea la ternura. Justamente esta cuestión de cerca y lejos, la cuestión del amor, esto de que no estás conmigo y estás. `La ternura disuelve esa línea ilusoria que divide las aguas de la separación y del encuentro`, dice Juarroz, y es tan bailable lo que dice...: `Cerca y lejos no existen, los crea la ternura, como el mar crea la playa, como el borde inasible de sus sabias mareas`", profundizó la coreógrafa.

Y completó: "Hay otra cosa que tomamos en cuenta para la improvisación y es que cualquier movimiento mata algo. ¿Sabés lo que es tener conciencia de que cuando te movés estás matando algo? `Mata el lugar que se abandona, el gesto, la posición irrepetible, algún anónimo organismo`. Eso dice Juarroz y lo usamos como concepto para este trabajo. Porque en este caso elegí a este escritor que leo mucho, que es fantástico. Es un poeta alucinante y parece que tuviera danza en su poesía, es una permanente alusión al movimiento".