Firuletes y ochos. Una finta, un corte y una quebrada. Gardel, Discépolo, Troilo, Piazzolla, Goyeneche. La muchachada y los cajetillas, todos empilchados pa' milonguear. Los tamangos bien lustrados y el lengue perfumado. El vestidito de percal y el rodete bien cinchado. Desde hace por lo menos un mes y por los próximos dos, Rosario será territorio de tango.

La semana pasada se lanzó oficialmente un nuevo capítulo del Encuentro Metropolitano de Tango. Y aunque esta es ya su segunda edición, la marca de la nueva gestión cultural, es ineludible. "Lo importante de este ciclo es que viene haciendo el camino inverso a otros: viene marchando desde las orillas al centro; de C.A.O.V.A. a la Casa del Tango", dice la titular de la cartera cultural municipal, Chiqui González.

Con tres actividades simultáneas, la ciudad se pone a tono para que los rosarinos le saquen viruta al piso casi en cualquier lado. "Quisimos que fuera algo diferente; no una gran fogata sino muchos fueguitos -dice González-. Por eso decidimos que no fuera un día o dos, sino tres meses, noventa días enteramente dedicados al tango".

En este sentido en abril la municipalidad lanzó la milonga "Pa'que bailen los muchachos", un encuentro que buscó convocar a las parejas tangueras para reeditar los antiguos bailes de barrios, en los bares y en los clubes y, por qué no, entusiasmarlos para participar en el Campeonato Mundial. "Lo único que nos importaba era que la gente se juntara para el disfrute; a escuchar tango, a bailarlo, a sentirlo", dice Chiqui.

Así, entre el 5 y el 27 de este mes, en distintos espacios públicos se desarrollará el II Encuentro Metropolitano, una convocatoria a los músicos y bailarines, profesionales o no, para que compartan escenario del teatro, para que se pongan a milonguear en la calle. Con este espíritu, en la tarde del sábado 20, la cortada Ricardone se convertirá en una callecita canyengue. "Vamos a cerrar la calle, como se hacía antes. Va a haber baile y música en vivo. También va a haber cuentos de Borges, luthiers que enseñarán los cuidados del bandoneón. La idea es que se acerquen los habitués de las milongas, que se animen a bailar. Después, a la noche, se abrirán las puertas del teatro La Comedia para el espectáculo central, que cerrará la noche con broche de oro el Nuevo Quinteto Real", comenta la funcionaria. "Le pusimos como título 'Romería tanguera', en homenaje a aquéllos encuentros. Pero todo con mucho ascetismo, porque no quisimos recrear ninguna época. Es una reconstrucción sin nostalgias de nada, porque el tango está vivito y coleando. Por eso hacemos esto sin ribetes costumbristas ni propuestas 'for export'. Quisimos mostrar el tango que vive en la ciudad desde hace tiempo, en los barrios, en los clubes, en las milongas".

A lo largo de todo el mes, además de La Comedia muchos otros espacios se verán inundados por este alud tanguero. La Isla de los Inventos (Corriente y Wheelwright), el Bar Olimpo (Corrientes y Mendoza), el Bar del Negro (Brown y Callao), el Café de la Flor (Mendoza y Laprida), el Bar Rojo (Necochea y Riobamba) y, por supuesto, La Casa del Tango (Av. Illia y España).

En la última etapa, entre el 23 y el 25 de junio el teatro municipal será sede del IV Campeonato Mundial de baile de Tango. "La idea es que de aquí pueda salir, del resultado del ciclo, un envío a la semifinal internacional, que tendrá lugar en agosto en Buenos Aires".