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* En el baño de damas de aquel colegio religioso con una letra minúscula en chapa negra sobre fondo blanco y atornillada a la puerta, del lado de adentro, ella contó que pudo leer cuando era muy niña: "!No olvideis. Dios siempre vigila!". Con énfasis, justo delante del inodoro y a la altura de los ojos.

* Mensaje de texto donde se adivina la imploración a Dios. "Uf, acá me descompongo del calor, no doy más....el aire del colectivo no tira, el asiento de pana me hace transpirar y tengo un tipo al lado que no se bañó en varios días..Es un asco, menos mal que no comí nada...me bajo en la primer parada...!Por Dios!".

* "Por Dios he jurado, por Dios he matado, por Dios volveré" reza la leyenda en una pared lateral del fondo de una casa de fin de semana de un tipo pesado, amigo de los fierros y las vendetas. Una preciosura el mural, donde resalta un galán de ojos celestes emergiendo en un mar de nubes lanzando rayos desde las yemas de sus dedos blancos.

* Dios suele ser algo que habita en lo Monstruoso, a la puerta de su caverna, babeante y glorificado en las penurias. Mientras quienes han estudiado el Verbo y que aseguran en estos lares ser sus representantes se pasean con polleras negras refugiados en lecturas improbables. Fracasados sin amor. El otro dios, el de las comedias con humor negro, el de los abrazos, el del sexo feliz, el del infinito sin respuesta, el asado, el vino y la ausencia de traición es el que llevamos en el bolsillo interno, el que no mostraremos a nadie por más que llueva o truene o por casualidad nos muramos. Ese, ese es el que todo lo vale. Ese dios es la patria cósmica que le da sentido al vivir.

* Al parecer, el vocablo bigote es una corrupción de la voz alemana bey Gott, que significa "¡Vive Dios!". Esta expresión era constantemente utilizada a modo de juramento por los caballeros flamencos del séquito de Carlos V mientras se atusaban las puntas de sus enormes mostachos. La costumbre estaba vista por sus camaradas españoles como una muestra de arrogancia. "Y de estupidez, colonialismo y peste", agrega el historiador.

* Dios está presente en las telenovelas malas de la tarde, donde los milagros chapuceros hacen levantar a los inválidos o embarazar a las vírgenes. Los libretistas, unos turros interesantes que mastican la carne podrida que les da el canal o quien sea no tienen idea del daño ocasionado. En todo caso se solidifican, cobran el sueldo y a casa a dormir en familia. Nunca escribirán algo digno, sus hijos serán de mazapán y al vida se les derretirá luego entre los dedos, mientras mueren infartados por la presión de escribir y hablar tanto y tan en vano de Dios, de Dios y de Dios, quien les termina enviando un buen relámpago cargado de cocaína, harto de tanto manoseo.

* "¡Yo soy Dios!" casi gritaba el pibe adolescente en los previos años de plomo. La Triple A barría los cuerpos a balazos y tanto la gente de a pie como a las agrupaciones de extremo quienes trataban de escapar de la cacería, armados con algún Fal, un sudario criollo y una pastilla de cianuro. El pibe que aseguraba ser Dios, veía que asesinaban y secuestraban. Todo lo sabía desde su reinado invisible. Ser Dios lo protegía, lo absolvía y le confirmaba su inocencia en la masacre. "Yo soy Dios", casi gritaba. Cuando creció y pudo descubrir que el Dios permanente e imantado de las iglesias también era cómplice sintió una profunda vergüenza. Nunca más quiso ser Dios, pero fue alguien, alguno que lucha por la justicia desde lo terrenal y su diploma de abogado. Cuando le hablan de Dios se sonríe como si le contaran las andanzas de un amigo borracho.

* La cruz de la empuñadura de la espada es la misma que se usó para evangelizar y esclavizar. Es una redundancia pero siempre es bueno no olvidar. "Dios aprieta pero no ahorca" dicen las santas lenguas. "Ja, haceme reir", recita un torturado fantasmagórico que ha recibo descargas eléctricas, pesares, hierros candentes, ahogos en agua, mierda y fuego. Todo en nombre de Dios. "Haceme reir, ¿querés?", susurra el alma ya sin odio mientras espera en la Rueda Mágica: volver para seguir en el camino de la claridad en busca de la justicia.

* Los piratas ingleses tendían una celada a los bergatines españoles que extraviaban el rumbo, colocando entre las piedras, en sitios donde se podría encallar fácilmente, unos ingeniosos faros desmontables y la imagen atrayente de una cruz iluminada para que creyeran estar en playas o embarcaderos amigables. Terminaban desvalijados, ahogados, comidos por los peces o pasados a deguello. Dios suele ser un imán impiadoso en manos de forajidos.

* "Ser soldado y musulmán es algo sagrado".

"Estuvo en Afganistán ¿Cómo es la guerra?".

"Eso queda entre Dios y yo".

(De un diálogo de una película sobre atentados, religiosidad y occidente)

* En una casa, en la zona de ascenso por una escalera interna hacia la terraza, descubrió colgado y enmarcado un papel que aseguraba al donante haber adquirido un pedacito de cielo a cambio de una suma en metálico para la Iglesia.

* En la escuela religiosa el Padre los conminaba a que confiesen en voz alta sus fantasías eróticas. Luego los obligaba a que en soledad, se enroscaran el Santo Rosario alrededor de sus órganos sexuales.

* Máxima Zorreguieta, reina consorte de la monarquía holandesa en actividad recibe al año cerca de seis millones de dólares como sueldo por ejerzer la Nada. En ignaros tiempos los reyes representaban al Altísimo. Visto desde su origen rioplatense se puede decir que hoy por hoy, Dios es argentino, millonario y mujer.

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