Viernes, 2 de diciembre de 2005 | Hoy
Ante las expresiones vertidas por la ministra de Educación Adriana Cantero y por la diputada provincial Maria Rosa Stanoevich asegurando que la provincia continuará trabajando en el marco de la Ley Federal de Educación vigente, AMSAFE cree necesario realizar algunas consideraciones al respecto, intentando aportar a un debate al que ineludiblemente el actual gobierno debe convocar. La actual situación de deterioro del sistema educativo en nuestro país, es producto por un lado de la crisis social que extendió la marginalidad y la pobreza, determinante de las condiciones en que nuestros chicos ingresan a la escuela, y simultáneamente, el avance de la aplicación de la Ley Federal y de las políticas neoliberales en educación. Ya son varias las jurisdicciones que están abandonando la estructura impuesta por la mencionada ley, atendiendo a que la misma no solo no resolvió los principales problemas de la educación sino que los profundizó y generó nuevos conflictos como fue la fragmentación total del sistema y el vaciamiento de contenidos. Cuando la ex ministra Stanoevich afirma que "la deserción y la baja calidad de aprendizaje no son atribuibles directamente a una normativa", se debe aclarar que no es posible dejar de considerar a la hora de evaluar la aplicación de la LFE que la misma se inscribe en un proyecto político, económico, social y cultural de exclusión y marginación creciente, iniciado en nuestro país con la última dictadura y profundizado durante el gobierno menemista, (Reuteman y Obeid en Santa Fe). La política educativa de ese momento plasmada en la LFE (1993), fue funcional a dicho modelo y contribuyó en su aplicación, a la profundización de las diferencias que atentaron contra el ejercicio real de la democracia. De igual modo, las políticas curriculares se establecieron sobre la base de pseudos procesos de consulta, de contenidos empaquetados diseñados desde las unidades centrales que colocaron al docente en mero ejecutor y que no priorizaron la recuperación de nuestra identidad nacional y latinoamericana en la formación de la conciencia ciudadana. En el marco del Congreso Educativo Provincial organizado por AMSAFE en julio de 2005 en el que 1500 docentes de los 19 departamentos de la provincia, abordaron la complejidad del trabajo docente en relación con la aplicación de la LFE, la docencia santafesina, una vez más desde la sanción de la Ley, expresó claramente su posición exigiendo la derogación de dicha normativa, así como de la Ley de Educación Superior (LES) y de los Acuerdos marcos emanados del Consejo Federal de Educación. En el mismo sentido, en el 3er Congreso Educativo Nacional de CTERA del que participaron docentes de los sindicatos de base de todo el país, se dejó claramente expresado en primer lugar, la necesidad de derogar la LFE y la LES a fin de recuperar la dimensión nacional de la educación y la inmediata promoción de un proceso popular y democrático para la sanción de una nueva normativa. La actual coyuntura nacional y provincial, donde se visualiza un despertar del aparato productivo y una posibilidad de reinclusión social de amplios sectores que el modelo de los 90 pretendió hacer desaparecer, es una nueva oportunidad para reabrir un debate necesario, tanto referido a la distribución de la riqueza como del conocimiento. Santa Fe, provincia pionera en debates educativos y reformas curriculares, cuna de pedagogos como Rosita Ziperovich, Leticia y Olga Cossettini, Rubén Naranjo, entre otros tantos, hoy con estas posiciones oficiales exhibe una actitud conservadora que omite las demandas más sentidas.
Comisión Directiva Provincial de AMSAFE
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