Lluvia

La lluvia del pasado 27 de febrero mostró la verdadera situación de abandono de la ciudad de Villa Gobernador Gálvez. Toda la red de desagües colapsó por la falta de mantenimiento y se inundaron barrios completos. Los vecinos, que venían advirtiendo lo que pasaría con numerosas quejas y petitorios, espontáneamente protestaron y siguen protestando en los barrios. Primero una pedrea contra una camioneta de la municipalidad en Pueblo Nuevo y después cortes de calles que la prensa grande silenció.

Mientras los vecinos protestaban, la intendenta continuó con su semana de vacaciones en Córdoba (las segundas vacaciones de este verano) y el presidente del Concejo que debió reemplazarla estaba también en lugar desconocido quedando la ciudad acéfala. La razón del secreto de estas vacaciones, es que hubiera tenido que asumir la intendencia el Vicepresidente 1º del Concejo, el opositor Rodolfo Cavalleri. El caso es que la ciudad estuvo acéfala mientras muchos vecinos protestaban por toda la ciudad y deambulaban por las dependencias municipales en busca de una ayuda que nadie les brindó. Sólo una retroexcavadora, desesperadamente, trataba de emparchar la situación limpiando los lugares más comprometidos. Fue la semana de la anarquía. Denunciamos ante la opinión pública la tremenda irresponsabilidad de las autoridades municipales, su total falta de sensibilidad ante el sufrimiento de centenares de vecinos inundados y mojados y opinamos que si tienen honor, corresponde que presenten su renuncia, en forma inmediata, los responsables de no hacerse presente ante la catástrofe de centenares de familias: la intendenta Graciela Bonomelli y el presidente del Concejo, Daniel Machado.

Raúl Cerlani

Frente de Agrupaciones Villagalvenses; Partido Intransigente; Frente Progresista Cívico y Social

Pobres

El crecimiento de la pobreza en los últimos años fue alarmante, el gobierno continúa con las políticas que, en su momento, sirvieron de paleativos para las personas que siguen estando por debajo del nivel de la pobreza; esta situación empeora cada día. Hay conflictos mediáticos, de pobres contra pobres; la clase media baja sufre de xenofobia. No queremos reflexionar, optamos por el simplismo y nos vamos a los extremos, nos convertimos en jueces, y como decimos vulgarmente, metemos a todos en la misma bolsa. Los trabajadores sin trabajo, precarizados con salarios de hambre y de vergüenza, caben en esa bolsa; al igual que esos otros trabajadores que se organizan para recuperar su fuente de trabajo y son reprimidos; también están aquellos que son dueños de la tierra, hoy expulsados y perseguidos por reclamar lo que les corresponde; en esa bolsa grande, también entran los viejos jubilados﷓pobres y en la miseria; juntamente con los niños y jóvenes discriminados y condenados a una vida sin posibilidades de futuro, como así también las trabajadoras del sexo, los cartoneros, chicos de la calle, adictos, discapacitados. Muchos de los que se ocupan de llenar esa bolsa construyen muros para obstruir el crecimiento y el bienestar de la sociedad, la excluyen, son traficantes de la muerte, amparados por "garantes" que los mantienen impunes. La pobreza, no termina con un Plan Jefes o un bolsón, sino, dándole participación a los protagonistas de la construcción de un país.

Adriana Noemí Diez