Color y sorpresa le dieron a la marcha de repudio al golpe del 24 de marzo de 1976 los Payasos Autoconvocados. "Estamos en un momento histórico diferente en el que podemos empezar a tomar las cosas con alegría", subrayó María Franchi, una de sus 45 integrantes. Marcharon con sus narices rojas detrás de una barrera transparente, concebida para que la gente le pusiera su propio significado. "Una bandera que sea de la gente, como la libertad", cantaban los payasos. Al llegar al Cemar, en San Luis y Moreno, se subieron a la explanada. "Los milicos están llorando, porque van a ir todos presos. Nosotros de Carnaval", cantaban y gesticulaban. También pusieron humor cuando pasaron frente a la Catedral, en el mismo lugar en el que todos los años se canta: "Ustedes callaron cuando se los llevaron". Los Payasos hicieron allí una pequeña parodia, con uno de ellos vestido de Papa.