La Policía de Santa Fe tiene 22 mil agentes. Ayer, su nuevo jefe, José Luis Amaya reveló que uno de sus "principales objetivos" será salir del descrédito social, "recuperar la confianza" de los santafesinos en la fuerza a su mando. Y prometió una autodepuración interna en todos los niveles para "sacar" de las filas "a todos los que se apartan de la línea y están fuera de la ley". Amaya admitió la necesidad de que la Policía recupere la "confianza" de los ciudadanos. Le preguntaron sobre la vuelta de la Gendarmería a la provincia. "No sé si es necesario", contestó.

-¿Cuántos efectivos nacionales serían necesarios?

-Todo lo que venga es bienvenido, pero yo le puedo asegurar que con la Policía de Santa Fe vamos a estar bien--, sorprendió.