Momentos de pánico se vivieron ayer al mediodía cuando tres delincuentes armados protagonizaron un intenso tiroteo con la policía, tras asaltar la sucursal del banco Macro ubicada en Washington y Rondeau, logrando llevarse 10 mil pesos. Dos ladrones fueron detenidos, uno de ellos gravemente herido; mientras que otro, que también sufrió heridas de bala, alcanzó a fugarse con el dinero del atraco. Los ladrones tendrían entre 40 y 50 años de edad, y según la policía se trataría de gente con experiencia en el delito.

Minutos antes de las 11 de la mañana, tres ladrones ingresaron en la sucursal del Macro, y tras reducir al personal de custodia y amedrentar a las personas que estaban en la entidad, efectuando disparos al aire, vaciaron una caja. Pero los integrantes de un móvil de la Patrulla Urbana, que circulaba por Rondeau, bajaron del vehículo policial alertados por la situación. Una mujer relató que la presencia policial desesperó a los delincuentes: "Empezaron a gritar: 'Viene el comando'. Yo pensé que nos mataban a todos".

La llegada de los uniformados apuró la salida de los ladrones, quienes quisieron huir tomando a una mujer tomada de rehén, que fue liberada cuando los asaltantes llegaron hasta donde estaba estacionado un Fiat 128 blanco. Con la llegada de refuerzos del Comando Radioeléctrico la situación se complicó y comenzó el intenso tiroteo que causó una gran conmoción en la zona norte de la ciudad.

Uno de los frustrados ladrones, a quienes se les secuestraron armas calibre 9 milímetros, fue atrapado mientras intentaba escapar en el Fiat 128. El otro detenido quedó gravemente herido y fue operado en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria; mientras que el prófugo -un delincuente con un frondoso prontuario, apodado el Toro- sería el jefe de la banda y también estaría herido por un disparo en el tórax. El jefe de Orden Público, comisario Jorge Wollschlejel, dijo que se montó un operativo de rastrillaje en la zona para buscar al ladrón.