La titular del juzgado Civil y Comercial de la 13ª Nominación, Marta Gurdulich, denunció ayer presiones de lo que denominó la "corporación política y judicial" e involucró a la administración del ex gobernador Carlos Reutemann, al revelar hechos de corrupción a los que llamó "puentes de plata": "A mí me los ofreció un ex procurador, que fue el doctor (Jorge) Bof. Reutemann lo sabe perfectamente". Y remató: "Me da vergüenza pertenecer a este sistema judicial". Según Gurdulich después de su negativa a Bof se le abrieron cuatro sumarios en los que no tuvo derecho a defensa. "La Corte se manejó con impunidad con un juez, entonces qué le queda a la gente que va a la justicia a pedir alimentos". Recordó que el gobernador Hermes Binner dijo que "crujía la corporación judicial y no veo que se esté cumpliendo". El hecho disparador fueron las pintadas con las que amaneció el frente del edifico que habita, en Italia 34: "jueza=muerte".

La jueza Gurdulich denunció ayer que había sido amenazada, "esta no es la primera vez que ocurre, tiene que ver una denuncia que presenté ante la Secretaría de DDHH de la Nación donde denuncié la necesidad de que los jueces tengamos una independencia en nuestra magistratura, en la que denuncio a todos los integrantes de la Corte de la provincia, al procurador Agustín Bassó, y al camarista Ariel Ariza, por tramitación de sumarios irregulares en mi contra en los que se me viola el derecho de defensa como magistrada. También por un hostigamiento laboral constante de la que soy víctima, y por una persecución que comenzó a partir de 2001 cuando saqué un fallo contra un multimedios de la ciudad".

"Yo no quiero ser otro juez Carlos Triglia, quien transitó también sumarios irregulares, y lo acusaron de coimero, hasta que se enfermó y se murió. Pero después de haberlo ensuciado y estando muerto el Colegio de Magistrados y de Abogados le pusieron una placa frente al tribunal, Me parece que las placas no sirven después de muerto".

Según Gurdulich "al poco tiempo de mi denuncia recibí una amenaza telefónica donde me preguntaban '¿Así que te gusta denunciar?'. Hasta ahora se mandaron actuaciones al ministro de Justicia, Héctor Superti, quien en su momento había sido mi abogado defensor en un sumario administrativo. Están atacando a mí persona. Esto no tiene que ver con una investigación específica, pero en seis meses me abrieron cuatro sumarios. No tengo miedo, es hora de llegar a hablar lo que pasa en la Justicia, el derecho de tener una Justicia igual para todos. Me da vergüenza formar parte de este sistema judicial. Y no me voy porque sigo luchando. Y por eso fui a la Comisión Interamericana a hacer la denuncia. Eso fue la molestia que tuvo la Corte". Gurdulich se preguntó públicamente "si se le viola a un juez su derecho de defensa, que le queda para un ciudadano común".

También apuntó contra la Secretaria de Derechos Humanos Rosa Acosta, quien recién el 12 de mayo le pidió los sumarios a la Corte que fueron iniciados en su contra, cuando la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación, "le envió mi presentación en octubre de 2008. No entiendo la lentitud, más parecido al cajoneo de mi denuncia".

Gurdulich criticó al ministro Superti quien "tuvo todo este material, pero se calló porque me defendía y sabía perfectamente. Y lo más vergonzoso es que la hija del doctor Superti integra la Corte, es relatora del doctor Daniel Erbetta" (ver aparte).

La jueza volvió sobre el denominado "puente de plata" y abundó que "es favorecer en causas a grandes sectores del poder. Mire las causas que se archivan, yo no sé porqué no se investigan".

Cuando se le consultó si todas las administraciones habían ofrecido "puentes de plata", Gurdulich señaló: "No sé todas, pero a mí me la ofreció un ex procurador, que fue el doctor (Jorge) Bof, y me lo ofreció en su despacho. Bof me dice que hacía 13 años que estaba dentro de la justicia, y que era tiempo de tener mis amigos: si hacés un favor, recibís otros. Esto me dio a entender. Reutemann lo sabe perfectamente y tiene todos sus amigos dentro de la Corte. Me dijeron que tenía que tener mi grupo de amigos. Yo dije que el brazo no me lo iban a doblegar. Y después de esa charla negativa, me abrieron cuatro sumarios. Nunca pensé que sería tan al instante". Requerida sobre si "hacer favores" implicaba una manera de ascender en el ámbito de la Justicia, la jueza fue contundente: "Sí, hacer favores sí".

"No se olviden -agregó- que estamos en una etapa de elecciones y al senador Reutemann a lo mejor le molesta. Pero todos sabemos que el doctor (Rafael) Gutiérrez es primo de Reutemann y hay toda una Corte política puesta por el senador Reutemann. Yo me pregunto por qué no tenemos una Corte como hizo Néstor Kirchner, independiente, que es lo que yo pretendo".