La comisión de Servicios Públicos del Concejo Municipal comenzó ayer a tratar el aumento en la tarifa de taxis junto a los representantes de la Asociación de Titulares de Taxis y el sindicato de Peones. Según el último estudio de costos aprobado por el Ente de la Movilidad, el incremento es del 22 por ciento. Desde el oficialismo, el concejal Manuel Sciutto (PS), titular de la comisión, propuso que el aumento sea escalonado; una parte ahora y el resto supeditado a la conexión del GPS, como lo establece la ordenanza, en las 470 unidades que se resisten a instalarlo. En este marco, la concejala Norma López (FpV), reiteró el pedido a la municipalidad para que abra los protocolos y de esa manera evitar que la instalación sea manejada sólo por sectores privados. "Los ediles pidieron tiempo para tratar la cuestión en el interior de sus respectivos bloques. La lógica dice que los tiempos urgen y la semana que transcurre quizás sea decisiva para marcar posicionamientos", anticipó Sciutto.

Los concejales que integran la comisión de Servicios Públicos ﷓Sciutto, López, Osvaldo Miatello (Compromiso con Rosario), Oscar Greppi (ARI﷓CC), María Eugenia Schmuck (UCR) y María Julia Bonifacio (Unión Pro) recibieron ayer a Mario Cesca, titular de una de las asociaciones de propietarios, y a Horacio Boix, del gremio de los tacheros, para analizar el último estudio de costos que arrojó un incremento del 22 por ciento en la tarifa, estipulando que el valor real de la bajada de bandera es de 10,05 pesos y 50 centavos la ficha cada 100 metros.

Antes de la reunión, que pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo lunes, el titular del bloque socialista en el Palacio Vasallo señaló a LT8 que había consenso en respetar el estudio de costos que realiza la Facultad de Ciencias Económicas de la UNR, y que la idea de su bloque era "aprobar una parte del aumento antes de fin de año y dejar otra parte para 2104".

Sciutto planteó que el último tramo del incremento en la tarifa estaría condicionado a "la aplicación total del GPS", en las 470 unidades que todavía no cumplimentaron lo exigido en la ordenanza, y que llevó a un grupo de propietarios de licencias a presentar un recurso colectivo de amparo en la justicia provincial, ya que pretenden que la municipalidad se haga cargo de los costos de instalación del sistema y del costo mensual.

"Para que el sistema de GPS funcione correctamente, en toda la información que se necesita, también hay que instalarlo en forma paralela al odómetro (marcador de kilómetro de un auto). Por ese motivo pedíamos que el Ente de la Movilidad liderara la apertura de los protocolos porque si no iban a ser manejados desde los sectores privados, y además corríamos el riesgo de que los precios se dispararan. El municipio tiene una línea, pero muy pocos taxistas adhirieron", señaló la concejala López, quien por otra parte dijo que desde su bloque evaluarán "si la tarifa tiene que ser trasladada en forma completa al usuario, debemos ver otras cuestiones".

Mientras Cesca desestimó la posibilidad de que se otorgue "un incremento escalonado", hay "un atraso tarifario del sector, motivo por el cual el servicio se deteriora día a día". Boix insistió en que "se debe aplicar un aumento que alcance a los siete días de la semana". Según el gremialista, el atraso en la tarifa "hizo que los choferes nocturnos se reduzcan notoriamente en número. Es más, algunos titulares ofrecen la caución de sus vehículos, ya que no pueden soportar los costos".

Los concejales de la comisión también recibieron a representantes de la Cámara de Remiseros y choferes. Alfredo Gordo, de la Cámara de Remiseros, reiteró en la reunión que un aumento los condenaría "a la desaparición, debido a que no es rentable trabajar en estas condiciones. De noche no hacemos más de 10 viajes y en circulación nocturna no hay más de 70 vehículos".