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La conferencia que los referentes del Frente Justicialista para la Victoria montaron anteayer en el Congreso de la Nación con Omar Perotti y Alejandro Ramos a la cabeza para mantener a nivel país el escándalo del escrutinio provisorio santafesino enojó a los principales referentes del Partido Socialista, entre ellos, a la intendenta Mónica Fein, quien ayer fustigó a quienes acusaron al gobierno de hacer fraude en las PASO, con el propósito encubierto de "volver a la ley de lemas y a la boleta sábana".

"Está más que claro que no hubo fraude, sino un error de información y de interpretación", recalcó ayer la intendenta tras el habitual izamiento de la bandera junto al Monumento. Y se anticipó a lo que un rato después, en Santa Fe, explicara el gobernador Antonio Bonfatti (ver aparte). "Es lo que ha pasado siempre, todas las mesas fueron ingresadas, y quedó una parte sin escrutar por distintas situaciones, errores administrativos propios de un sistema novedoso y que trajo transparencia al sistema electoral como no lo tiene ninguna otra provincia", alegó.

Fein aceptó que las denuncias contra el sistema tienen algún fundamento. "Puedo reconocer que fue un error técnico, de información, pero nada más lejos que no respetar el voto, porque esta provincia estructuró la boleta única, el financiamiento a los partidos. Por eso me parece injusto y desproporcionado que los medios nacionales estén discutiendo sobre un error técnico a reconocer". En ese sentido, repelió a los emisarios de la sospecha. "La verdad, me asombra que conociendo nuestra transparencia, que saliendo claramente perjudicados en los resultados, se instale un fraude en contra nuestra". De allí que entrevió desde el PJ fogonean la crítica al sistema de boleta única porque, de fondo, "quieren volver a la ley de lemas y a la boleta sábana".

La prueba de transparencia, señaló Fein, es que "hoy el escrutinio definitivo está demostrando que no hay ningún cambio, y que esto ha sido un error informativo. Tendrían que haber dicho que faltaban cargar 800 y pico de mesas", interpretó.

La intendenta dijo que los errores que quedaron a la luz deben servir para corregir el escrutinio provisorio y la transmisión de datos para la elección general del 14 de junio.

En el oficialismo hay real preocupación sobre la suerte a correr en la próxima y definitiva pulseada electoral, porque además del avance de la oposición en las urnas, se suma este escándalo que tomó difusión nacional y que quizás no baje de cartel hasta que concluya el escrutinio final. Fein sostuvo que la situación no influirá en la general.

"Me parece que es mejor interpelar la boleta única que discutir por qué en otra provincias hay boletas sábanas, por qué hay punteros que reparten boletas, por qué hay arrastre de la boleta. Discutir lo que es más transparente en lugar de implementarlo, eso es más fácil. Seguramente para la próxima lo vamos a hacer mejor. Habrá urnas más grandes, mejoraremos el escrutinio provisorio. Eso es lo que hay que hacer, mejorar".