Militantes de la Multisectorial de Mujeres de Rosario escracharon ayer al juez Adolfo Prunotto Laborde, en su casa en Fisherton, para reclamar "Justicia por Paula Perassi". Con fuerte presencia de seguridad privada y policial en el barrio, las integrantes de la Multisectorial repartieron volantes y pegaron afiches en los postes de luz de la zona donde vive el juez para repudiar "la injustificable resolución de fuerte carácter misógino en la causa por la desaparición de Paula Perassi y por los aprietes perpetrados contra su padre, Alberto Perassi". Durante una hora llevaron adelante la acción para recordar que "el miércoles 19 de agosto Prunotto Laborde revocó la prisión preventiva para los ocho procesados en la causa que investiga la desaparición de Paula Perassi. Los acusados son tres civiles y cinco policías: el empresario Gabriel Strumia, Roxana Michl, Mirta Rusñisky y los oficiales de la Unidad Regional XVII de San Lorenzo, Aldo Gómez, Ramón Godoy y María José Galtelli, el comisario Jorge Enrique Krenz y de la Agrupación Cuerpos, comisario Daniel Puyol. Cinco días después, el juez citó a Alberto Perassi, amenazándolo con iniciarle una querella si no se rectificaba de sus dichos públicos después de conocida la resolución".

Mientras las activistas repartían volantes, recibieron el aliento de algunos vecinos y también algunas reticencias. La última zona que volantearon fue la cuadra donde vive el juez. Para las mujeres que se movilizaron ayer, la actitud de Prunotto Laborde es "una nueva e inaceptable provocación contra la familia Perassi. Por eso repudiamos lo que hace este integrante del servicio público de justicia, que da cuenta de que el Poder Judicial no es Justicia".

Las integrantes de la Multisectorial plantearon a través del volante que "Alberto Perassi vive con la impunidad y el encubrimiento. Viven en su hogar con custodia, producto de las amenazas recibidas, y chaleco antibalas". Paula Perassi desapareció el 18 de septiembre de 2011. Desde ese día su padre busca respuestas sobre lo ocurrido.