Dos hombres armados balearon a otro, ayer al mediodía, cuando llegaba al edificio céntrico donde vive, y le arrebataron un maletín con alrededor de 50.000 pesos. Enseguida escaparon en el auto del que habían descendido y donde los esperaba un cómplice. La víctima se reponía anoche en un sanatorio.

El atraco configura las características de una salidera, la clase de asalto en la que sus autores cuentan con información previa y certera acerca de su presa y el botín por robar. Empezaba la tarde cuando un hombre subió al auto de un amigo que lo trasladó hasta su domicilio, en la torre de bulevar Oroño 549. Acababa de retirar una considerable suma de dinero. Y cuando el conductor se aprestaba a estacionar para que el hombre del maletín descendiera, un Volkswagen Suran color negro, y de vidrios polarizados, llegó y frenó en doble fila, bloqueando la salida del primer vehículo.

Bajaron dos hombres armados y a los gritos, reclamando la plata del portafolios, cosa que no dejó dudas del conocimiento previo de la situación. Hubo disparos intimidatorios contra el coche, y uno de esos balazos le acertó en las piernas al hombre que intentó primero retener el maletín. Tras ello, los pistoleros volvieron al Suran donde los esperaba el tercer cómplice, y huyeron raudos por el bulevar hacia el norte. En tanto, el hombre herido -cuya identidad no fue suministrada- terminó internado en el Sanatorio Británico, aunque su vida no corría peligro.