Los concejales del bloque Ciudad Futura presentaron ayer su portal en internet y la decisión de donar cada uno el 70 por ciento de sus dietas al financiamiento de su espacio para garantizarse -según proclaman- "la total autonomía política, sin deberle nada a las empresas que financian las campañas y los partidos". Uno de ellos, Juan Monteverde, concluyó que en estos meses de debut en el Palacio Vasallo encontraron "mucha mezquindad en algunos concejales". Acepta que la negociación sea un código omnipresente en la práctica deliberante, pero asegura que su objetivo es superarlo. "Si no, renunciamos y nos vamos", planteó.

La sala de Empleados de Comercio, en Corrientes al 400, se impregnó de rojo y blanco, y de todos los eslogan que resumen el ideario del movimiento que arrancó hace algunos años con la experiencia del Tambo de la Resistencia, en Nuevo Alberdi, y que el año pasado hizo pie en el Concejo con buen suceso: tercera fuerza más votada, con casi 90 mil votos y a sólo 8 puntos de la primera, el Frente Progresista.

Monteverde, Caren Tepp y Pedro Salinas presentaron su "plan Transparencia", cuyo epicentro y ventana es desde hoy el sitio www.transparencia.ciudadfutura.com.ar.

En el acto, los tres ediles ratificaron lo que hacen desde el primer mes que cobraron como tales: donar el 70 por ciento a lo que llaman "el instrumento político", o sea, el partido Ciudad Futura. A razón de unos 58.000 pesos que cobra cada concejal, cada uno aporta al espacio 42.000 pesos, y se sirve como sustento personal de los 16.000 restantes. "Queremos seguir viviendo como antes de ser concejales y ganar lo mismo que cada asesor del bloque, porque el trabajo de todos vale lo mismo", definió Monteverde. "La política no es para profesionales o famosos, sino para gente común y con salarios de gente común", añadió. El edil, de 30 años, que emergió en la agenda pública hace más de un lustro con el movimiento Giros, explicó que "el dinero es para financiar la campaña y no deberle a un banco o una empresa, y para difundir por medios alternativos cuando los medios masivos no publiquen lo que hacemos en el Concejo. Además, para consolidar los proyectos extra Concejo como la escuela de gestión social, los emprendimientos productivos y los espacios culturales".

En el portal estrenado ayer publicarán todo lo necesario a la impronta de rendirle cuentas a su electorado y, de paso, promocionar su trabajo en el Concejo. Se exhibirán el presupuesto anual de Ciudad Futura, los salarios de sus tres ediles y de los asesores, sus declaraciones juradas de bienes, la agenda de cada concejal en tiempo real y la bitácora de sus intervenciones en comisiones y en el recinto de sesiones.

Ante un auditorio constituido por militantes y adherentes, Monteverde explicó que "en este momento en el que vivimos cuestionamientos a la política, pareciera que todos somos ladrones porque algunos lo son. Entonces, cuando se cuestiona a la política hay que salir a mostrar que no hay nada que ocultar. No se sale con menos política, sino con más y mejor política".

Requerido sobre las primeras conclusiones de estos siete meses de concejalía, Monteverde reveló cierto desencanto y también alguna sorpresa. "Las cosas nuevas hacen ruido. Nos encontramos con mucha mezquindad en algunos actores, no en todos. Notamos que en cada tema siempre está por delante el cálculo de si es una victoria o una derrota política para determinado sector, y no la política pública por la que estamos hablando. Desde los centros culturales y la ley de víctima se discute si es una victoria o no para Ciudad Futura, entonces sale o no sale según ese prisma. Eso dificulta el debate político de fondo. Son resistencias propias de una forma de hacer política que entra en tensión cuando viene otra forma y choca contra esos intereses", criticó.

Monteverde concedió que "la política así funciona hoy, pero no admitimos que sea así: así está, pero nuestro trabajo es ir corriendo esos límites. Si no, renunciamos y nos vamos. También vimos que nada es lo que parece desde afuera. Con algunos concejales que suponíamos serían los primeros que se opondrían y otros que serían los primeros en ayudarnos, se dio al revés. No siempre lo ideológico se traduce en términos de alianzas".