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La cadena de supermercados Coto impidió ayer el ingreso a 11 trabajadores del primer turno que debían reincorporar tras la conciliación obligatoria dictada el pasada miércoles por el Ministerio de Trabajo provincial hasta el 31 de agosto, en el marco del conflicto laboral que mantiene la empresa, argumentando que la ley de descanso dominical le ocasiona caída en las ventas. Desde la Asociación de Empleados de Comercio (AEC), que denunció de inmediato la situación en la sede local de la cartera laboral, plantearon que Coto "desafía al gobierno al no acatar la conciliación", y a la vez destacaron que el gremio sí la acatará, por lo que "no adoptará ninguna medida que implique su incumplimiento". Por la tarde, inspectores del Ministerio fueron a verificar la situación de cuatro empleados despedidos que tenían que presentarse en el segundo turno, y allí constataron que la empresa sí les permitió que entraran a trabajar. Hoy por la mañana habrá una nueva inspección para constatar la denuncia del gremio y eventualmente abrir un expediente que contempla fuertes sanciones económicas.

El gremio mercantil precisó que la conciliación, dictada por el director provincial de Relaciones Laborales, Mario Gaggioli, disponía "retrotraer la situación laboral y de servicio al estado en que se encontraba a las 24 del día 8 de agosto, debiendo la empresa reintegrar y dar efectiva dación de tareas a los trabajadores que se les haya notificado la situación".

Pero la empresa impidió que 11 trabajadores que habían sido despedidos, de un total de 22, pudieran ingresar ayer a la mañana a las sucursales, situación que fue inmediatamente informada al Ministerio por el sindicato, que pidió su intervención el pasado martes cuando Coto, a diferencia de lo que decidieron otras grandes cadenas, no reincorporó a de 22 de los 55 trabajadores que había despedido a fines de junio.

Hasta las 17 de ayer, solamente 4 de los 22 trabajadores que Coto había despedido pudieron retornar a sus tareas habituales. Se trata de trabajadores afectados a la sucursal de Mendoza y Alsina, mientras al resto se les seguía impidiendo el ingreso.

Desoyendo los términos de la conciliación, la empresa agrega otro capítulo al conflicto originado por la implementación de la ley provincial de descanso dominical.