Héctor Avila, ex cabo de policía de 52 años, que trabajaba para una agencia de remises de Pérez, fue asesinado ayer a la mañana en inmediaciones de la colectora de avenida de Circunvalación y Cerrito. Avila había realizado un viaje desde Zavalla con dos pasajeras en un automóvil Wolkswagen Polo color blanco. Al descender las mujeres del vehículo, el policía retirado fue interceptado por varios delincuentes, y luego de luchar contra ellos al tratar de resistirse al robo, fue ultimado de varios disparos: uno en una pierna y otro en la espalda. Además, el remisero presentaba una herida en la frente, entre los ojos. La policía detuvo luego a dos mujeres, una de 26 y otra de 43 años, que habrían sido las últimas pasajeras del chofer. Además, un testigo del hecho afirmó que puede reconocer a los homicidas e incluso aportó el apodo de uno de ellos: "Chino". Al cierre de esta edición ninguna de las tres mujeres permanecían detenidas.

Los autores del hecho, con el magro botín de 20 pesos, se escaparon entre los pasillos de una villa cercana. La investigación por la muerte de Avila quedó a cargo de agentes de la Sub Comisaría 22, que hasta ayer continuaban trabajando para resolver un crimen que conmocionó al barrio, y que ocurrió a pocas horas de la inauguración de los corredores seguros nocturnos, que se implementaron para que los taxistas cuenten con una mayor seguridad, debido a los constantes robos que vienen padeciendo.

Avila venía manejando el vehículo de alquiler desde Zavalla -donde habría llegado para trasladar a dos mujeres que trabajan en una whiskería de la zona- hacia Rosario. El viaje habría culminado en avenida de Circunvalación y 27 de Febrero, alrededor de las 10. Minutos más tarde, se produjo el asesinato del remisero.

El comisario Jorge Wollschlejel declaró que el conductor del remis "habría tomado un viaje en Zavalla unos minutos antes y fue víctima, aparentemente, de un hecho de robo calificado. A la persona le efectuaron 3 disparos de arma de fuego y perdió la vida a consecuencia de ello".

Para el comisario Wollschlejel, antes del desenlace trágico que le costó la vida, "el conductor del remis intentó resistirse, porque quedó una de sus prendas de vestir rota -una remera verde- en el interior del vehículo, lo que estaría indicando que hubo una trifulca sobre la calle antes de que le efectuaran los disparos que le causaron la muerte".

El cuerpo del remisero fue encontrado sin vida a pocos metros del Polo blanco que manejaba, y muy cerca de una villa ubicada en la zona suroeste en la colectora de Cerrito y Circunvalación.

Cuando le preguntaron a Wollschlejel si el remisero tenía como destino del viaje la zona donde apareció muerto, el comisario dijo: "No lo podemos precisar, ya que se están llevando adelante las primeras averiguaciones, pero todo parece indicar que sí, que era un viaje habitual el que lo llevó hasta el lugar donde lo asesinaron".

Vecinos del barrio dijeron que los robos en la zona son habituales y que los taxis y remises no quieren entrar al lugar por temor a ser asaltados. Un testigo ocasional comentó que los ladrones le sacaron al remisero 20 pesos, y que el autor de los balazos que le causaron la muerte habría sido un muchacho de 20 años, apodado "Chino".

El jefe de la brigada de Homicidios, Daniel Corbellini, remarcó que la causa está caratulada "tentativa de robo calificado" seguida de muerte, descartando que la muerte de Avila haya sido un ajuste de cuentas. Los compañeros de Avila, se movilizaron hasta el lugar del crimen, mostrándose consternados por la muerte del colega.