Lunes, 13 de noviembre de 2006 | Hoy
Dos abogados del foro local sientan posiciones divergentes alrededor del rechazo del Colegio a participar del proceso de reforma de la Justicia.
Por Alicia Simeoni
La exagerada representación judicial, la hegemonía del poder político y de la "corporación judicial" y la falta de "respuesta concreta" para el tratamiento de la metodología de designación y remoción de jueces son algunas de las líneas que sostiene Vildor Garavelli, ex director del Colegio de Abogados e integrante de la línea interna Movimiento de Abogados, para defender su ausencia en el proceso de reforma del Poder Judicial impulsado por el gobierno de la provincia. Garavelli suma otro elemento: "No pueden ser los mismos integrantes del PJ los que dirijan la reforma y es lo que sucede en la práctica". La decisión de no intervenir en el plan de reforma judicial fue la que se impuso en la asamblea de profesionales del miércoles pasado. Desde una mirada opuesta, el constitucionalista Iván Cullen formula críticas a la respuesta que dio el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rafael Gutiérrez, al pedido de incorporación de temas formulado en julio y que llegó recién en octubre. También calificó de "imprudente" las expresiones del ministro de la Corte, que descalificó el tratamiento de estos temas en la asamblea de abogados pero sostuvo -y mantiene esa posición- que el Colegio de Rosario debe participar "porque ya se dijo que se pueden tratar todos los temas". Dos lecturas totalmente opuestas del proyecto de reforma, de sus objetivos y de la respuesta que Rafael Gutiérrez dio al colegio rosarino.
"Ante la crisis que vive la Justicia y el descrédito del Poder Judicial, el poder político reacciona diciendo que hay que hacer algo y ese algo es al que siempre recurren los establishments políticos en Latinoamérica. Son respuestas parciales y sin diagnóstico que culminan en meras reformas de códigos de procedimientos". Como integrante del Movimiento de Abogados, línea interna que interviene en la vida institucional, sostiene que la situación se hace "más grave" porque el proyecto y posterior ejecución a través del llamado Plan Estratégico es con "una hegemonía absoluta del propio poder político y de la corporación judicial".
Para Garavelli el plan de reforma judicial que está en marcha deja fuera el debate "más serio" que debe darse en la "reformulación del Poder Judicial" con discusión de políticas y métodos referidos tanto al nombramiento como a la remoción de jueces". La inclusión del llamado 'estado judicial', cuestionado por el anterior directorio del Colegio y también por el actual -que volvería a introducir dentro del PJ a magistrados ya jubilados- sigue siendo un punto fuerte de diferencias.
Cuando Rosario/12 le consultó a Garavelli por las expresiones del ministro de Gobierno Roberto Rosúa en cuanto a que los temas planteados "se están tratando en las comisiones", el ex director del Colegio de Abogados explicó que "no nos consta que sea así y además tenemos la seria sospecha que con la correlación de fuerzas "sólo legitimaríamos decisiones tomadas a priori". Se refiere al discutido 'estado judicial' "como postura unánime de la Corte y el Colegio de Magistrados".
Para insistir en la "exagerada representación" del Poder Judicial señala que los colegios de la provincia tienen un delegado cada uno pero que la CSJ vota a través de sus seis miembros. "¿Dé qué estamos hablando entonces? -dice Garavelli- los que dirijan la reforma del Poder Judicial no pueden ser sus propios miembros. A ellos hay que consultarlos pero nunca deberían dirigir el proceso y de hecho lo hacen".
Garavelli no opinó acerca de la postura del oficialismo en la conducción perteneciente a la lista Defensa Profesional que firmó en julio el convenio de integración del Plan Estratégico de reforma del Poder Judicial, a través del presidente Arturo Araujo, pero aclaró que el Movimiento de Abogados sostuvo siempre la postura que describió.
"La respuesta que dio el presidente de la CSJ no dijo en ningún momento si había disposición para incluir los puntos reclamados, es más, sí expresó que temas tan serios como estos no debían someterse a una asamblea, con una muestra de total desprecio por el mecanismo democrático que utiliza el Colegio".
El constitucionalista Iván Cullen estaba entre los asambleístas colegiados días atrás cuando la postura mayoritaria fue la de no participar del plan de reforma. Él junto a otros pocos profesionales entendían que el Colegio de Abogados de Rosario debía participar de la reforma. Para Cullen, entre las razones para "estar dentro de la reforma" está que los puntos que pedían tratarse "pueden ser incluidos". Se refiere a aquellos que tienen que ver con los procesos constitucionales -amparo, hábeas corpus, acciones declarativas de inconstitucionalidad y de todos aquellos proyectos que tienen como fundamento la proteccion rápida de los derechos fundamentales". Cullen que es presidente del Instituto de Derecho Constitucional y Ciencia Política del Colegio recordó que en la asamblea de julio se pidió que se incluyeran algunos temas y que se excluyera el tratamiento del llamado estado judicial. La respuesta de la Corte señaló que "se pueden tratar todos los temas por lo tanto el pedido fue satisfecho".
La respuesta que el presidente de la CSJ dio a la asamblea de julio es en sí misma "criticable, un gran error", comentó Iván Cullen a Rosario/12, porque la respuesta llegó recién en el mes de octubre y además dijo que fue "imprudente" porque cuestionó "sin ninguna necesidad el mecanismo de la asamblea para la toma de decisiones. "Pero más allá de estos aspectos que crean susceptibilidad lo cierto es que debemos participar porque se satisface todo lo que pedíamos. No hubo ningún sector interno de la vida del Colegio que sostuviera mi posición pero continúo convencido de que debemos participar".
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.