La Municipalidad reclamó ante la Justicia el desalojo de un asentamiento irregular ubicado frente del Centro de Distrito Oeste, en avenida Perón y Felipe Moré, surgido tras el temporal, conformado por 40 familias cuyas viviendas precarias quedaron destruidas a raíz de la granizada. El municipio hizo la presentación ya que el asentamiento se formó alrededor de vías de ferrocarril "de intensa actividad lo cual consituye todo un peligro", explicó el secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza. Sobre avenida 27 de Febrero se registraron otras dos ocupaciones de 40 familias cada una: una a la altura de Río de Janeiro y otra en el cruce con Valparaíso, con el apoyo político de Polo Obrero.

Desde esa agrupación, Alicia Escudero, dijo a Rosario/12: "Hubo un grupo de compañeros que se contactaron con el Polo, que comenzaron a plantear la necesidad de pelear por un terreno propio. Estas tierras hace años que están desocupadas, nunca se les dio ninguna utilidad. Se decidió entre todos los vecinos ocupar el lugar para armar viviendas".

Escudero cuestionó a la directora del Distrito Oeste, Susana Bartolomé "que el domingo apareció para amenazar y apretar a todas las familias con la Gendarmería, policía y Control Urbano y ahora se arroga el derecho de pedir el desalojo vía judicial cuando los terrenos pertenecen al Onabe, es decir al Estado nacional y no al municipio".

Según la militante, "el temporal del miércoles pasado puso al desnudo la precariedad en la que viven una importante cantidad de rosarinos. Fueron aquellos que tenían sus viviendas en condiciones precarias y el granizo destruyó lo poco que tenían. Esto los llevó a ocupar un terreno y reclamar por una vivienda digna".

Ante la posibilidad de que la Justicia ordene el desalojo a través de las fuerzas de seguridad, Escudero advirtió: "La decisión de todos los vecinos es firme, nadie va a salir del terreno hasta que no aparezca una respuesta a la necesidad de la vivienda. Aquí se implementó el Plan Hábitat que dio cobertura al 10 por ciento, tampoco el Fonavi es una solución porque las exigencias que ponen en cuanto a los ingresos hacen imposibles que cualquier trabajador que hoy vive de changas o de trabajos informales pueda acceder a ese programa".

Ayer hubo cortes en 27 de Febrero y Cafferata, 24 de Septiembre y Avellaneda, Avellaneda y Amenábar, Uriburu y Avellaneda, Avellaneda y Garibaldi, 27 de Febrero y Circunvalación y bulevar Segui y Grandoli. A ello hay que sumarle los asentamientos irregulares levantados sobre 27 de febrero a la altura de Río de Janeiro y Valparaíso.

Para el secretario de Promoción Social, Pedro Pavicich, los nuevos asentamientos son consecuencia de un déficit histórico en materia de vivienda que la tormenta "desnudó aún más".