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El incidente entre Camaño y Kunkel se produjo al finalizar la reunión de la Comisión de Asuntos Constitucionales que trataba las denuncias por supuestas presiones en torno del análisis del proyecto de Presupuesto 2011. La situación se originó cuando la diputada les comunicó a los legisladores que la decisión de la comisión sobre las denuncias debían formalizarse por escrito en el término de un día, a lo que los diputados oficialistas respondieron que el tema se podía votar en esa misma reunión, o esperar unos mintos para presentar la nota por la que se decidía el archivo de las cuestiones.

Cuando Camaño dijo "queda levantada la reunión" los diputados oficialistas, entre los que se encontraba Kunkel, comenzaron a pedirle que continuara con el tratamiento. Según varios testigos que se encontraban cerca de ambos legisladores, Kunkel le preguntó a Camaño: "¿Ahora van a quemar las urnas como en Catamarca? Yo no soy el que dijo que tenemos que parar de robar dos años para sacar al país adelante. Yo nunca prometí falsamente que no iba a robar por dos años y después seguí robando", agregó Kunkel frente al resto de los diputados que estaban en la sala mientras la diputada duhaldista se le acercaba. Una vez al lado de Kunkel, y mientras el diputado seguía hablando, Camaño lo tomó de un hombro y con la otra mano le dio una trompada. El diputado kirchnerista sólo sonrió y en ningún momento respondió a la agresión.

Luego del incidente, Camaño intentó explicar su reacción afirmando que "estoy harta de que me digan que soy la señora de", en referencia a los comentarios acerca de su marido, el gremialista gastronómico Luis Barrionuevo. "Como en todas las reuniones que compartimos, Kunkel grita cosas, mina la moralidad de los demás y no advierte su propia vida, que es bastante dispendiosa", concluyó la diputada del bloque del Peronista Federal.

Por la mañana, sin aportar información nueva, Lilita se limitó a leer una crónica con su versión de lo sucedido el día que fracasó la aprobación del Presupuesto en la Cámara baja. A su turno, Hotton señaló a la diputada del Frente para la Victoria, Patricia Fadel, como la persona que "intentó torcer mi voto". Finalmente, Álvarez denunció haber recibido llamados del titular del SEDRONAR, Ramón Granero y del intendente de Puerto San Julián, Nelson Gleadell, quien habría intentado comunicarla con el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido.

Patricia Fadel respondió a la denuncia de Hotton, negando haber presionado "a alguien que me llamó a mí y antes me había mandado un mensaje al celular". La diputada explicó que en el momento que atendió el llamado estaba contando los votos, "como lo hago siempre" y agregó que recibió con sorpresa el pedido de Hotton de acompañar una iniciativa "en defensa de la vida", minutos antes de la votación del Presupuesto 2011. Además, acusó a Carrió de liderar la operación y contó que la líder de la Coalición Cívica le agradeció la posibilidad de "volver a ser candidata presidencial en 2011".

La diputada nacional, Laura Alonso (PRO), aseguró que "negociar obras, negociar el Presupuesto, no es corrupción", sino hacer "política", al rechazar los testimonios de sus colegas que hablaron de dádivas por parte del Gobierno para que avance el proyecto oficial de Presupuesto. "Corrupción refiere al uso de los recursos públicos para beneficios personales", sostuvo la diputada.

La legisladora explicó que se ausentó en la madrugada del jueves 11 último de una sesión en la que se debatía el proyecto oficial de Presupuesto 2011 a raíz de "desinteligencias" en su bloque, que no especificó.