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Macri admitió la "incapacidad" de su administración para resolver la situación "porque no conduce la Policía Federal". Remarcó que "los vecinos están realmente preocupados, angustiados, asustados".

"No tenemos la menor idea (de cuándo se desalojará el club), porque el gobierno nacional trabaja aisladamente", se quejó Macri, quien ayer volvió a pedir a la presidenta Cristina Kirchner que dé la orden para desocupar las instalaciones tomadas hace ocho días.

En declaraciones a radio Mitre, el mandatario comunal resaltó: "Lo que sí tengo claro es lo que están viviendo el barrio, los vecinos. Ayer hablé un rato con ellos y, la verdad, el nivel de desesperación, de enojo, de confusión que tienen es enorme porque este tema ya lleva diez días".

"El grupo que ha usurpado es violento, como lo ha dicho la justicia, y los vecinos son gente de trabajo, que le ha costado toda una vida tener su vivienda propia, o que alquilan, pagan sus impuestos y encuentra que la Policía protege a los que usurpan en vez de protegerlos a ellos", manifestó.

Macri consideró que "en este desmadre de la ausencia del Estado, que no empezó ahora sino en la era kirchnerista, donde cada vez más se ha permitido cualquier cosa que va en la misma línea que los cortes de tránsito o la toma de escuelas".