EL gremialista, acusado de los delitos de "daño agravado, lesiones y amenazas coactivas", prestó declaración indagatoria ante el Juzgado Oral y Correccional 16. Segovia está acusado de manchar con pintura el rostro del supervisor de seguridad José Cáceres y de amenazar a la jefa de vigilancia Verónica Sánchez Sarina, en medio de una protesta realizada en la Estación Constitución de la línea C.

Además, está imputado de rociar con pintura en aerosol una cámara manual y el parabrisas de la cabina de conducción de una formación de subtes. Poco antes de ingresar en el juzgado, Segovia insistió en definir como "mentiras" los testimonios presentados en su contra por la empresa de subterráneos, que derivaron en la denuncia presentada por la Compañía Metropolitana de Seguridad, que brinda servicios a Metrovías, del Grupo Roggio.

El abogado del gremialista, el legislador porteño del MST-Nueva Izquierda Marcelo Parrilli adelantó que pedirá la absolución de su defendido por considerar que la acusación es "un nuevo intento de criminalizar la protesta social". El juicio, con acceso restringido para periodistas, proseguirá los próximos miércoles y viernes, cuando el tribunal escuchará una docena de testimonios, entre otros la declaración de la ex diputada Vilma Ripoll.

Por su parte, los trabajadores del subte anunciaron que permanecerán en estado de "alerta y movilización" hasta que finalice el juicio. "Luego de obtener la tan deseada firma que legaliza a la AGTSYP, este joven sindicato se enfrenta a uno de sus más grandes desafíos dentro de la coyuntura social, el juicio a Néstor Segovia, uno de sus representantes", advirtieron a tavés de un comunicado.